La Organización de Migrantes Nicaragüenses en México (OMIN), promueve la defensa de los derechos humanos, como un esfuerzo colectivo y multidisciplinario con el que viene trabajando desde hace un par de años en nuestro país, y en algunos puntos específicos de la geografía nicaragüense.
Sus integrantes explicaron que este esfuerzo se ha podido constituir a partir de una problemática central y de preocupación de todas y todos quienes integran la OMIN, como la migración nicaragüense y centroamericana en su tránsito por México.
A partir de esta base, nuestros esfuerzos han venido caminando en pro de la defensa de los Derechos Humanos para el beneficio de las personas que se han visto obligadas a migrar; generando investigaciones, diagnósticos y acercamientos a las poblaciones migrantes en su condición de vulnerabilidad”, indican a través de un comunicado.
Todo esto, aseguran, bajo la consigna de movilidad digna, que implica: jornadas de atención médica y psicosocial, jurídica, contactos, lugares y rutas seguras para los migrantes; a su vez, garantizando también la salud física y emocional de las personas en tránsito.
Estos esfuerzos vienen caminando con distintas instituciones oficiales del gobierno de México y organizaciones de la sociedad civil”, destacan.
Mencionan que después de la crisis sociopolítica del 2018 en Nicaragua, más de 180, 000 nicaragüenses cruzaron a Norteamérica de enero del 2022 hasta finales de noviembre del mismo año, según datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos. En promedio, se contabilizan 34 mil migrantes nicaragüenses que pasan mensualmente por México.
Las denuncias por secuestro y trata hacia población migrante nicaragüense creció exponencialmente después de la pandemia del SARS-COV2 y la crisis política, en abril del 2022 el Instituto Nacional de Migración rescató a más de 600 migrantes nicaragüenses en cuatro días; el 6 de diciembre se reportó la desaparición de 250 migrantes nicaragüenses en el norte del país, este instituto informó que los nicaragüenses se encuentran en el grupo de países con más migrantes rescatados”, agregan.
Ante este panorama tan desalentador de crisis migratoria, los integrantes informan que son una organización con fines no lucrativos que promueve la defensa de los derechos humanos de las personas migrantes en tránsito. Sobre todo, en estados del sureste mexicano; Oaxaca, Chiapas y Tabasco.
Finalmente, refieren que están para coberturar, acompañar y servir de enlace con las instancias correspondientes a personas en situación de vulnerabilidad en su paso por México, además de realizar continuamente jornadas de atención médica y psicosocial en lugares estratégicos de tránsito migratorio.
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