Empresarios pesqueros y pescadores de altamar, mostraron su preocupación por la pesca ilegal sin control que se practica en el litoral del Pacifico mexicano desde California hasta Chiapas ante la caza indiscriminada de especies en peligro de extinción.
Tan solo en algunos estados costeros del país, se ha iniciado una práctica de caza de algunas especies marinas en peligro de extinción como el tiburón, el atún y la vaquita marina, esta última ha sido atrapada en las redes agalleras de pescadores que no cuentan con permiso para realizar esa actividad.
No obstante, denunciaron que en los límites de Oaxaca y Chiapas se realiza la pesca ilegal del camarón, aun cuando está en veda algunos grupo aprovechan para capturar e impedir su reproducción y crecimiento para que alcance buen tamaño.
“Hay grupos que se han dedicado a acabar con la poca producción que queda, derivado de la falta de atención en cuanto a vigilancia en las costas mexicanas por el personal de la Secretaría de Marina”, explicaron los pescadores de altamar.
Posible boicot al camarón mexicano
Los empresarios pesqueros, comerciantes y patrones de embarcaciones, han mostrado su preocupación por la amenaza de boicot al camarón mexicano, derivado de la caza furtiva principalmente por la captura de la vaquita marina o marsopa más pequeña y en mayor peligro de extinción del planeta sólo vive en el norte del Golfo de California en México. Solamente quedan 30 vaquitas marinas, después de haber sufrido décadas de declive debido a quedar atrapada en las redes de pesca de camarón.
Explican que Greenpeace, la organización ambientalista, ha solicitado al gobierno mexicano que se prohíba de manera permanente todas las redes peligrosas de enmalle en el hábitat de la vaquita, que intensifique el cumplimiento de las regulaciones y elimine las redes ilegales que permanecen dentro del agua.
Y es que detallan que la vaquita enfrenta una amenaza importante: queda atrapada en las redes de enmalle de pesca. Estas son redes suspendidas entre dos boyas y capturan casi todo lo que pasa nadando, incluyendo la vaquita. Durante décadas, estas redes fueron utilizadas en el Golfo de California para capturarcamarón, abasteciendo al lucrativo mercado de los Estados Unidos.
De 1990 a 2010, la industria del camarón mexicano fue la principal responsable de la pérdida de más del 70 por ciento de la población de la vaquita, cuando el número de la vaquita se redujo de 700 a sólo 200 individuos.
“Nos preocupa este boicot a los que nos dedicamos a la exportación y venta de camarón que se captura en altamar, porque habría generado daños económicos importantes, por eso le pedimos al gobierno estatal y federal su intervención para que la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (CONAPESCA) y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) intervengan y se evite esta captura ilegal”, indicaron.
De esta manera, explicaron que en Mazatlán, Oaxaca y Chiapas donde se concentra un porcentaje importante de empresas que exportan, han mostrado su preocupación, porque en algunas partes de Estados Unidos se ha lanzado la campaña para pedirles a las empresas que dejen de comprar camarón mexicano.
En ese sentido, consideraron que la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca es la responsable para aplicar un programa y destinar los recursos para llevar a cabo los gastos de operación, en donde se instruya a los inspectores y con el apoyo del personal de la Secretaría de Marina para cuidar que no se siga realizando la pesca ilegal.
