Un grupo de vecinos y moto taxistas descubrieron el desagüe clandestino de la clínica hemodiálisis en la ciudad de Juchitán, mismo que descarga los desechos tóxicos al aire libre.
La mañana de ayer un grupo de moto taxistas y vecinos llevaban a cabo un tequio como hacen todos los domingos; realizaba una limpia a orillas del canal de riego que se encuentra a un costado del periférico entre el tramo Pimpollo-La gasera, justamente detrás de la colonia Mártires 31 de julio.
Durante la limpia una de las personas con machete en mano cortó accidentalmente un tubo negro del cual presuntamente salía sangre y otros residuos tóxicos, así como un fuerte olor pestilente.
Comentaron que dicha manguera está conectada a la clínica hemodiálisis donde realizan la transfusión de sangre y tratan problemas renales y que por las noches en ese lugar a orillas del canal sale un olor pestilente situación que podría ser peligrosa y desembocar en un problema de salud pública.
Tras descubrir el desagüe clandestino de esta clínica denominada Unidad Médica Renal Chapultepec Hemodiálisis ubicada a espaldas de la colonia Mártires 31 de julio, solicitaron la intervención de los elementos policiacos arribando al lugar algunos elementos municipales.
Minutos después y con la presencia del mismo presidente municipal, Emilio Montero López y parte de su cabildo, los elementos se comprometieron a indagar sobre esta situación.
El presidente y parte de su cabildo acudieron a las instalaciones de dicha clínica para entrevistarse con uno de los empleados, quien al conversar con las autoridades cayó en múltiples contradicciones sin poder demostrar que los residuos eran tratados con base en los lineamientos de sanidad necesarios.
Vecinos exigen que la clínica sea investigada y sancionada conforme marca la ley, pues podría estar contaminando el agua del canal de riego que atraviesa distintas colonias y secciones de esta ciudad, misma que es utilizada por la ciudadanía.