“La Rama”, una tradición que poco a poco se pierde
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

Istmo

“La Rama”, una tradición que poco a poco se pierde

En los años 70’s y 80’s, el Istmo se lucía con las comparsas de niños que salían a cantar


“La Rama”, una tradición que poco a poco se pierde | El Imparcial de Oaxaca

“Ya llegó la Rama, quítense el sombrero, porque en esta casa vive un caballero. Vive un caballero, vive un general, pidiendo permiso para comenzar”. 

“Naranjas y limas, limas y limones, más linda es la Virgen que todas las flores”, así rezan las coplas de una de las tradiciones más arraigadas en el sureste mexicano, una expresión producto de la mezcla de cultos indígenas y de la costumbre colombina que dominó al país por 300 años. 

Sin embargo, en la actualidad se están  perdiendo estos cantos que de acuerdo a la historia, los antecedentes de esta fiesta podrían remontarse a la antigua Inglaterra medieval, aunque “La Rama”  es una tradición navideña mexicana originada en los villancicos navideños,  especialmente en las formas tradicionales comunes a todo el Caribe como los aguinaldos venezolanos y las trullas puertorriqueñas. 

La hermosa tradición tiene lugar durante las fechas de las posadas, es decir del 16 al 24 de diciembre, aunque también puede extenderse hasta el 2 de febrero, día de La Candelaria y se practica en casi toda la costa atlántica y el Caribe de México, en el centro-sur de Veracruz, Oaxaca, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.

En el Istmo

En el caso de la región del Istmo, en los años 70’s y 80’s, en el pueblo de Tehuantepec, era común durante la tarde y noche ver a las comparsas de niños que llegaban a las casas pidiendo permiso para cantar.

“Se ha ido perdiendo esta tradición, ya sólo salen con la rama y bailan música más guapachosa, cumbias, música actual, ya no se escuchan los versos tradicionales, los coros, el estribillo de “La Rama” como la conocíamos. Es muy triste ver como poco a poco se va olvidando y lamentablemente las posadas no se pudieron realizar por la pandemia que estamos viviendo, sólo hubo algunos rezos con muy pocas personas”, indicó Rómulo Jiménez  Celaya, cronista de Tehuantepec.

Explicó que se adorna una o varias ramas frondosas, de cualquier árbol (pueden ser distintos). Los adornos pueden ser faroles de papel, esferas,  cadenas de papel de colores, globos, escarchas coloridas, esto a  de manera similar a un árbol de navidad.

Dijo que a diferencia del arbolito de navidad, la rama no se deja plantada en un lugar específico, sino que se realiza una procesión por parte de la comunidad que la elaboró para que recorra el barrio, en compañía de algunos familiares y amigos.

Señaló que en la actualidad los niños y jóvenes están inmersos en las redes sociales y anteriormente los niños jugaban en las calles, canicas, pelota, entre otros juegos. Mientras que ahora ya no se da tanta importancia  a las tradiciones.