Edificio público a punto de caer en Juchitán de Zaragoza

Un promedio de cincuenta comerciantes establecidos en la periferia del edificio Símbolos Patrios, en el centro de esta ciudad, se niegan a reubicar sus puestos a pesar de las malas condiciones en las que se encuentra el edificio.

Durante el terremoto del 7 de septiembre del 2017, el edificio quedo dañado en su totalidad, a dos años y cuatro meses de estos hechos, las afectaciones de han incrementado considerablemente debido a las replicas y fuertes sismos que se han sentido en las últimas fechas.

El pasado 16 de enero, luego del sismo registrado durante la noche, las autoridades municipales acordonaron el área debido a que las grietas del ala oriente del edificio crecieron considerablemente, lo cual pone en riesgo la integridad física de los comerciantes, clientes y personas que deambulan en la zona.

Frente el citado edificio se ubican una veintena de puestos de flores, en la parte baja comercios de alimentos, en el ala oriente de frutas, en el poniente un se ofertan fritangas y ofrecen sus servicios carretilleros.

En días pasados tras los graves daños estructurales que presenta el edificio, el ala oriente que servía como bodega al Servicio Postal Mexicano fue utilizada por un grupo de comerciantes para resguardar sus puestos y productos con la autorización de funcionarios municipales.
Lo anterior causo el malestar de los encargados del Servicio Postal de la ciudad, ya que en el lugar aun cuentan con muebles y paquetes que no han sido reclamados por sus clientes.

Las autoridades municipales han dialogado en diversas ocasiones con los comerciantes con el objetivo de reubicarlos para evitar posibles incidentes, ya que en los últimos días se han incrementado la actividad sísmica en la región del Istmo pero se niegan a respetar las indicaciones preventivas.