Adoptar un estilo de vida saludable requiere más que solo hacer ejercicio: también es fundamental cuidar lo que comes. En ese sentido, el kiwi se ha ganado un lugar especial como una de las frutas más completas para la salud ósea y general del cuerpo.
Con su característico sabor dulce con notas cítricas, el kiwi no solo es delicioso, sino que también está cargado de vitaminas, minerales y antioxidantes que lo convierten en un aliado natural para mantenerte fuerte y joven.
BENEFICIOS DEL KIWI PARA LOS HUESOS Y MÁS
De acuerdo con la Oficina de Suplementos Dietéticos de los Institutos Nacionales de Salud (NIH), el kiwi es rico en:
- Vitamina K: mejora la absorción de calcio y fortalece la densidad ósea, reduciendo el riesgo de fracturas.
- Vitamina C: clave en la producción de colágeno, que protege las células y ayuda en la salud de piel, articulaciones y huesos.
- Vitamina E, folato, cobre y potasio: nutrientes esenciales para el buen funcionamiento del organismo.
Además, un estudio de la Universidad de Harvard indica que el kiwi puede contribuir a prevenir el deterioro visual relacionado con la edad y aliviar dolores por inflamación crónica en las articulaciones.
¿CÓMO INTEGRAR EL KIWI A TU DIETA?
Aunque el kiwi ofrece múltiples beneficios, debe consumirse con moderación y como parte de una alimentación balanceada, acompañada de una rutina regular de ejercicio para obtener resultados duraderos en tu salud.