- PRIMERA PARTE
Entrevista con Adriana Alejandra Ramos León, presidenta del Primer Tribunal Colegiado en Materia Civil y Administrativa del Décimo Tercer Circuito
Con 26 años en la carrera judicial, dedicando toda una vida a la impartición de justicia, la magistrada, Adriana Alejandra Ramos León, presidenta del Primer Tribunal Colegiado en Materia Civil y Administrativa del Décimo Tercer Circuito con sede en el estado de Oaxaca del Poder Judicial de la Federación (PJF), es una de las 464 magistraturas que se someterá a votación popular el próximo 1 de junio de 2025.
Aunque reconoce sentir impotencia al ser elegida mediante un sorteo con una tómbola que pone en riesgo casi tres décadas de preparación profesional en el PJF, afirma que seguirá ejerciendo su profesión para servir a Oaxaca y México.
Carrera judicial
En la primera parte de la entrevista con la magistrada Adriana Alejandra, destaca su preparación y trayectoria desde su primer cargo hasta llegar a ocupar una magistratura en el que tuvieron que pasar 22 años de preparación profesional.
“Mi primer cargo en el Poder Judicial de la Federación fue expedido el 1 de marzo de 1998, cumplidos tengo 26 años, inicié como oficial judicial que era el nombre en ese tiempo, pero antes del 98 estuve algunos meses como meritoria como nos llamaban a las personas que apoyábamos en los órganos jurisdiccionales, pero sin recibir ningún sueldo, lo hacíamos con el afán de aprender, entonces entré a un juzgado de distrito con este fin, porque aún estaba estudiando en la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO) estudiante que es mi alma máter, entonces entré a practicar”.
Como proyecto de vida, la magistrada señala que desde que inició sus estudios en la carrera de derecho, su aspiración siempre fue trabajar en el Poder Judicial de la Federación. “En ese tiempo era poco lo que sabía de lo que se hacía, pero lo veía como una institución prestigiosa en el sentido jurídico y sabía que ahí se resolvían los asuntos de mayor importancia, entonces para mí era algo atractivo y quería aprender y trabajar ahí”.

Sus inicios
“Inicié en los archivos de los juzgados, áreas que siguen estando en los sótanos, después tengo un nombramiento como oficial judicial que se le conocía antes en el mes de marzo del 98, mi aspiración también era culminar la licenciatura en derecho y titularme lo más pronto que pudiera porque quería avanzar para otro cargo en el juzgado o en el Tribunal, pero necesitaba estar titulada y eso para mí se vuelve una gran motivación y una vez que obtengo el título que fue muy pronto, entonces inmediatamente presento mi examen y lo paso, así fue como pude aspirar a un nuevo nombramiento que fue como secretaria de un juzgado”.
Ramos León expuso que desde ahí empezaron sus exámenes para ir avanzando en la carrera judicial, “porque precisamente en el año 2002 es cuando presenté el examen para ser secretaria de juzgado y fui de las pocas que aprobó a nivel nacional, en ese mismo año se convierte muy importante para mi vida profesional y personal porque también me casé en ese tiempo para formar una familia en el que llegaron pronto mis dos hijos”.
Con las exigencias de ser profesionista y madre de familia, la magistrada comenta que ese tiempo enfrentó su primer limitantes en la carrera judicial “porque para poder avanzar en esta carrera encontraba esa limitación, o me dedicaba a mis hijos o seguir trabajando con unas cargas laborales pesadas porque desde todos los cargos, desde una persona oficial judicial tienen cargas de trabajo importantes, más un secretario o secretaria que se dedica a elaborar los proyectos de sentencia”.
“Lo veía difícil, entonces durante ese tiempo que mis hijos eran más pequeños no pensaba en ser juez sino seguir siendo secretaria, pero durante todo ese tiempo me seguí preparando, tomando cursos y capacitaciones porque la propia función te va exigiendo por los temas y tipos de proyectos que se van conociendo y presentando”.
“A la fecha me sigo preparando, aun teniendo a mis hijos terminé mi maestría en el 2015 y es cuando pensé que podía ser jueza y que podría aspirar a ese puesto, sabía que entre los requisitos que piden era toda esta preparación, el número de años y experiencia eran suficientes, te dan como una puntuación y así fue como empiezo a pensar en esta opción porque me había estado preparando si saber que iba hacia este puesto”
Durante la entrevista para EL IMPARCIAL, la magistrada añade que la carrera judicial no es solo de trámite, sino cumplir con toda una preparación profesional y proyecto de vida, incluso en ocasiones sacrificando la vida familiar.
“Algo que marcó mi vida en esta preparación es que en el 2015 tenía que aprender de memoria la ley de amparo cuando no teníamos como ahora en las páginas de internet, a veces lo teníamos que descargar en audios de la página de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), del mismo modo tenía que repasar la jurisprudencia y toda la doctrina judicial para estar actualizada.
Escala a Jueza
“Estando preparada, en el 2015 apruebo el examen para ser jueza y empiezo como jueza en el Juzgado Octavo de Distrito en Oaxaca en el 2016 y esta parte es muy interesante porque es muy común que cuando te inscriben como jueza o magistrado, te cambian a otra ciudad, afortunadamente en ese momento había la posibilidad y vacante en Oaxaca, y es así fue como pude quedarme en el estado”.
“Por eso toda mi carrera judicial la he hecho en Oaxaca, por una parte, he tenido la fortuna que se han desocupado los espacios y porque lo he buscado, siempre he estado muy orgullosa de ser oaxaqueña, he pensado que si algo puedo hacer y aportar lo quiero hacer en Oaxaca, porque es el estado donde nací”
Para la abogada de profesión, Oaxaca es tierra fértil para la preparación de excelentes impartidores de justicia, por lo que, a la fecha continúa avanzando y ejerciendo la profesión en la tierra del Benemérito de las Américas, Don Benito Juárez García.
“Cuando platicaba con mis compañeros de otros circuitos, me decían que salir de Oaxaca te da la experiencia, pero les decía sí salía a capacitarme en otros lugares y formarme, pero siempre quise estar aquí a ejercer mi profesión y a obtener los mejores conocimientos, siempre me ha gustado trabajar para mi estado y también ese era de los motivos que me hacen poder trabajar en el PJF, en una institución pública porque así puedo trabajar para los demás”.
Llegó la magistratura 22 años después

Fueron 22 años después, con un proyecto de vida en la carrera judicial que inició en un sótano de archivos, la actual presidenta del Primer Tribunal Colegiado en Materia Civil y Administrativa del Décimo Tercer Circuito, Adriana Alejandra Ramos León explica que le llegó la posibilidad de aspirar a una magistratura.
“Esto fue a través de una convocatoria, exámenes y estudiar, fue así como me inscribo a un concurso que en esa ocasión fue el primer concurso que se abrió solamente para mujeres porque se buscaba cumplir con la perspectiva de género, entonces se abre este concurso solamente para mujeres y una de las opciones que había es que fuéramos adscritas al mismo lugar donde nosotros nos encontrábamos y eso se vuelve a una motivación para inscribirme, fue así como apruebo el examen y quedamos 13 mujeres como finalistas y las 13 fuimos declaradas magistradas en esa ocasión”.
Así fue como en el 2020, Adriana Alejandra Ramos León, asumió como magistrada del Primer Tribunal Colegiado en Materia Civil y Administrativa del Décimo Tercer Circuito, cumpliendo con toda la carrera judicial, que podría perder en las próximas elecciones extraordinarias tras salir en el sorteo de la tómbola que realizó el Senado de la República.
“Entre todos estos momentos están inmersas una carrera de preparación profesional y capacitación constante, nunca presumo mis títulos porque creo que lo más importante lo que uno hace y los conocimientos que uno tiene no te sirve por sí solo para mostrar un grado, sino te sirven para desempeñarte mejor como profesionista en lo que uno haga, en mi caso como abogada y magistrada y una de las consignas personales que tengo es seguirme siempre capacitando”.
“Quiero estarme preparando y aprender del sistema judicial hasta el último día de mi vida, siempre me ha gustado aprender y leer, mi tema siempre se ha enfocado en lo judicial jurídico por mi función, actualmente estoy cursando una maestría de la función judicial precisamente con el propósito de cómo logra mecanismos más ágiles en un tribunal o en juzgado”.
En la segunda parte de la entrevista, la magistrada expone su punto de vista acerca de la reforma al poder judicial y sus aspiraciones para participar en el proceso electoral extraordinario que se llevará a cabo el próximo 1 de junio de 2025.