Profesores del nivel Primarias Generales de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) tomaron ayer de rehén a la ciudadanía e iniciaron lunes una jornada de movilizaciones de 48 horas, incluyendo un plantón permanente en el Zócalo de la ciudad de Oaxaca y cuatro bloqueos viales que afectaron el tránsito y las actividades económicas del Centro Histórico.
Desde las 6:00 horas los docentes instalaron lonas y casas de campaña en el Zócalo, la Alameda de León y calles cercanas. Posteriormente, comenzaron las protestas para exigir atención a su pliego petitorio, que incluye demandas como la recategorización de claves directivas, contratación de personal de apoyo y asistencia a la educación, pago completo de licencias, equipamiento de mobiliario y tecnológico en las escuelas, justicia laboral y alto al hostigamiento laboral y administrativo.
En entrevista para medios el secretario de Trabajo y Conflictos del sector, Carmelo Silva Montiel, la protesta dejó sin clases a 5 mil escuelas en las ocho regiones del estado, afectando a miles de estudiantes, asimismo señaló que al menos 15 escuelas permanecen cerradas debido a la violencia, siendo las de la zona triqui, en la región Mixteca, las más afectadas.
El dirigente señaló además un déficit de 650 trabajadores de la educación, de los cuales 150 vacantes son por jubilación, 300 asistentes de servicio y 200 administrativos, afirmando que algunos de estos espacios han sido otorgados a la Sección 59, lo que ha agravado el problema.
Durante la mañana, los profesores implementaron bloqueos en puntos estratégicos como el crucero de Fonapas, el estadio de béisbol, la glorieta Lázaro Cárdenas y el crucero de Cinco Señores, afectando severamente el tráfico vehicular en la ciudad. Aunque algunos bloqueos comenzaron a levantarse hacia las 7:30 de la noche, las protestas continuarán este martes.
La dirigencia de la Sección 22 no descartó la posibilidad de un segundo día de bloqueos viales, mientras el plantón en el Zócalo se mantiene como base de operaciones para seguir demandando respuestas a sus exigencias.