De vuelta, el rock de Mono Cilindrero
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

En Escena

De vuelta, el rock de Mono Cilindrero

A raíz de un documental de la banda, los músicos se reúne tras años de separación; este sábado tocan en la ciudad de Oaxaca


  • De vuelta, el rock de Mono Cilindrero
  • De vuelta, el rock de Mono Cilindrero

Considerada como una de las bandas oaxaqueñas que marcó época en la escena musical de la ciudad, Mono Cilndrero se reúne tras varios años de separación para tocar los temas que a más de uno puso a cantar hace más de 10 años.

En un tiempo en que sonaba el “rock en tu idioma”, Mono Cilindrero llevó dio vida a canciones de Black Sabbath, Doors, Rolling Stones, Santana, Led Zeppelin y Deep Purple. En estas especies de tributos, las guitarras y percusiones llegaron a convivir con los violines y echar mano de varios recursos que, quizá sin ser evidentes, tejieron un puente entre la música clásica y el rock.

Esta noche, la banda conformada originalmente por Jesús Ferrusco en la guitarra, Amaury Martínez (+) en el órgano, Carlos Cruz en la batería, Alberto Revilla en el bajo y León Lory en la voz, regresa al escenario para rendir tributo a los años que los llevaron a ser una de las bandas icónicas de Oaxaca. A partir de las 22:00 horas, el Txalaparta vibrará con el rock, en una segunda oportunidad que se da por motivo del documental que René Ortega dedica a la agrupación.

Y aunque el pasado sábado varios quedaron fuera del lugar por llegar al cupo máximo, la noche de hoy podría cambiar la suerte para escuchar a quienes tocaron por última vez en 2004.

La velada de hoy congregará a dos de los músicos originales (Ferrusco y Lory) en una nueva alineación que incluye a Carlos Cruz (batería), Gustavo Baca (en la batería), Roberto Clemente (bajo) y Luis Cobch (guitarra). Aunque también le acompañará Linda Morris (esposa de Ferrusco), el artista y músico George Moore y una sección de la Sinfónica de Oaxaca y la Orquesta Primavera.

Previo a la presentación, los músicos toman un descanso del ensayo para recordar los orígenes de la banda. Ferrusco, quien daba clases al fallecido Amaury, recuerda cómo aquel chico de 13 años tomaba clases de solfeo y de violín con él y Linda.

-Y él cada clase me decía que si me gustaba el rock y yo le decía que me encantaba el rock. Cada clase le iba subiendo dos rayitas a su cuestionamiento, llegó un momento en que dice: ¿y le gustan los Doors? -le digo, pues es un grupo de hecho de mi generación. Hasta el momento en que Amaury le suelta: ¿y si hacemos un grupo?
Pero Ferrusco le decía: sí, ¿cómo no?

-Le daba el avión nada más. Y así estuvo hasta que un día le dije: ¿y cuál te sabes?- pues “Enciende mi fuego”.
De este himno de los Doors, Ferrusco le pidió traer la pieza, nota por nota, como requisito para hacer la banda.

– Y a la siguiente clase que trae su órgano y la toca fantásticamente, como en original. Y dije: sale, va. Necesitamos un cantante y él trajo a León Lory, con quien estudió en el Cedart y con nosotros tres inició la banda.

De ese tiempo, Lory, el vocalista, explica que siempre se pensó en que antes de evolucionar a cualquier otra cosa, el objetivo era hacer conciertos, a manera de tributos.

-No era una banda de bar, se pensaba siempre como una banda de conciertos. Los ensayos eran bastante intensos, de muchas horas. De Doors fueron casi seis meses.

Ferrusco le interrumpe y aclara: “fueron tres meses”.
-Yo los sentí como seis,- dice León

Ambos ríen y Lory añade que se debió a que era la primera vez que tenía una disciplina y que aunque era gran esfuerzo, los espacios conseguidos por Ferrusco eran “maravillosos que nos abrían la puerta de inmediato”.
-Siempre fueron cóvers, sí, siempre fue el estudiar para crecer y tener un evolución mayor y seguir estudiando. Al menos para mí, era una delicia hacer una música que desde chiquito escuchaba con mis papás, una maravilla, -añade el vocalista sobre el repertorio de la banda.

Mono Cilindrero se alimentó de los ritmos del rock clásico (Doors, Led Zeppelin, Pink Floyd), pero también se llevó con la música clásica, pues a decir de Lory, Amauri lo metió mucho en ello y el convivir con Jesús y a Linda todo el tiempo le permitió entenderla y tenerla a la mano.

Los músicos, tras 20 años del proyecto, subrayan en que se ha dado mucho de ver quiénes son los pioneros, qué tocaban y qué hacían. Ellos, explican, no estaban en ese canal y que si lo que tocaban eran cóvers… “¡Claro! ¿Quién no toca cóvers? “¿De dónde sacas escuela? ¿De dónde sacas ‘feeling’, de dónde sacas lo demás para hacer lo tuyo?

-Cuando juntas a un grupo de jovencitos que no tienen muchos antecedentes musicales dentro de la música, tenemos que agarrarnos de algo que nos sirva de escuela y qué mejor escuela que los maestros del blues y los maestros del rock. La idea era que pasara una temporada viendo, aprendiendo del rock y en un futuro hacer nuestra propia música, pero si no tienes parámetro no tienes antecedentes musicales, no vas a hacer nada.

Así lo explica Ferrusco sobre el trabajo de la banda que espera que del concierto de hoy y del pasado surja un material (junto al documental) para que el público los siga escuchando.

-Parece ser que la música de estos dos conciertos (del 12 y el 19) a lo mejor se puede utilizar para sacar en un vinilo- cuenta Ferrusco.

Y es que, como añade Lory, “al final de cuentas toda esta reunión es gracias a René, la Rana Chilanga y todo está para el documental Mono Cilindrero”.

René Ortega, el responsable de esta reunión, dice que la idea del documental viene porque él ha estado muy cerca del grupo desde que se inició y podría decirse que él ha grabado a la banda desde el 96, por lo que tiene videos de esos años.

Él quería entrevistar a su primo, Lory, para subir esos videos Youtube, pero la idea creció hasta conseguir contacto con Jesús, a quien habían visto por última vez en 2004, de tal forma que se pensó en algo más serio, un documental a 20 años de Mono Cilindrero.


aa

 

Relacionadas: