No importa el género, la música tiene el poder de ayudar

El tenor Fernando de la Mora une su música a las “buenas causas, me gusta hacer este tipo de labores, aunque no siempre están presentes, me siento halagado de que hayan confiado en mí, y si mi voz sirve para ayudar, pues creo que es momento de hacerlo”, platicó en entrevista con Crónica.

De la Mora se une a la celebración por su vigésimo aniversario de la Fundación Comparte Vida A.C, el cual se llevará a cabo en la Sala Nezahualcóyotl del Centro Cultural de la UNAM el próximo 14 de noviembre.

Una noche en la que el tenor presentará la ópera Cavalleria Rusticana de Pietro Mascagni, concierto en apoyo a al Programa de Trasplante de Médula Ósea en la lucha contra la leucemia, “esto es una muestra del poder que tiene la música, que no importa el género que uno cante, sirve para ser parte de causas tan nobles, y más artistas deberían unirse”, dijo.

Además de unir al público con la música, Fernando expresó “es un acercamiento cultural el que se les brinda, además de una nueva esperanza para todos aquellos que forman parte de la fundación. Esta ópera en particular es una de las más sonadas en el mundo y de las mejores, por eso me enorgullece que sea parte”.

“Siempre hay nervios porque por primera vez interpretaré con ellos, pero creo que es parte de los retos que tenemos los portadores de una voz tan fuerte como la mía, debemos sacarle el mejor provecho y tomarnos de la mano de grandes instituciones como Cavalleria. Me parece la ocasión perfecta para hacerlo, nos ayudamos entre nosotros y ayudamos a todos aquellos que padecen esta enfermedad”, compartió.

La lírica del tenor, considera, es parte de un bien común “ya que si se trata de dejar un mensaje positivo en la gente, siempre he levantado la mano, me gusta mantener bien firmes mis raíces y creo que todo es un conjunto, vamos de la mano con la sociedad que a final del día es la que nos mantiene en un lugar al escuchar nuestras propuestas”.

Destaca que no sólo se ha involucrado en el concierto, sino que ha tenido la oportunidad de conocer a donantes e investigar un poco más acerca del proceso por el que atraviesan, desde el momento de hacer pruebas para ver si son compatibles, hasta el momento en el que se ha logrado esa conexión.

“Es de verdad impresionante y, como se dice por ahí, la música es parte de la mejor medicina que los seres humanos pueden tener”, finalizó.