El secretario de Hacienda y Crédito Público, Carlos Urzúa, destacó que el gobierno federal no quiere que la deuda pública del país se dispare, por lo cual es necesario mantener una política de austeridad y gasto eficiente.
Dijo que el gobierno federal mantiene su meta de lograr un superávit primario (ingresos menos gastos) de uno por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) para 2019, pese a las menores expectativas de crecimiento.
Ello implica tener una bolsa equivalente a 250 mil millones de pesos, considerando que el PIB nacional será cercano a 25 billones de pesos, refirió.
“No sólo queremos tener un superávit primario, siempre, sino que ese superávit sea suficiente para mantener la razón deuda-PIB a lo largo del tiempo de manera constante, en 45 por ciento”, señaló el funcionario.
En su participación en la Reunión Nacional de Consejeros Regionales de BBVA México, especificó que es posible crecer cuatro por ciento de forma anual en esta administración, siempre y cuando el gobierno siga actuando con prudencia y no se presenten sobresaltos como los que hemos visto.
Por su parte, el funcionario señaló que el país debe dejar de usar dinero en efectivo “lo más rápido posible”.
TERMINAL AÉREA
El jefe de la Oficina de Presidencia, Alfonso Romo, al ser cuestionado sobre si existe la posibilidad de que el NAIM se retome, dijo que “a Texcoco no se le mueve ni un pelo, para ser claros y honestos”, sin embargo, aceptó que la forma en cómo se tomó la determinación de cancelarlo no fue la mejor.