El artista Germaín Martínez Cruz denunció públicamente que a más de un año de haber donado una de sus piezas a la Casa de la Cultura “Maestro Antonio Martínez Corro”, de Huajuapan de León, la obra no aparece y presuntamente está en manos del edil, Luis de León Martínez Sánchez. Ante esto, teme que el destino o uso de la pieza sea distinto al que se propuso con la donación.
El autor de la obra “Jarabe mixteco” señala que hasta ahora ni el personal del recinto ni del palacio municipal le han respondido sobre el paradero de la pintura. Además de negarse a otorgarle fotografías de la parte trasera de la pieza, en la que especificó el destino del cuadro, es decir, para el recinto.
Hasta la fecha, la obra de 1.35 por 1.10 metros no ha vuelto a ser exhibida en la Casa de la Cultura, donde la colocó un día antes de llevarla al palacio municipal para la donación formal ante el edil. Este último, dijo, un proceso que le indicó el entonces encargado de la casa, Efrén Zárate Cruz.
Germaín explica que inicialmente acudió con Zárate Cruz para externarle su interés por donar la obra en la que se resalta un bailable emblemático de la comunidad. Sin embargo, una vez colocada la pieza en el recinto, Zárate Cruz le dijo que era necesario llevar la obra ante el edil, ante la ausencia de un director de la casa. Junto con la pieza, a Germaín se le explicó que debía adjuntar un documento dirigido al presidente Luis de León.
Yo lo hice con buena intensión (el escrito) para que fuera formal y el presidente fuera testigo…Bajamos la obra de la Casa de la Cultura y la llevamos al ayuntamiento”, relata el autor, quien a puerta cerrada y solamente con la presencia del equipo de comunicación del edil entregó la pieza.
La obra de 1.35 por 1.10 metros no ha vuelto a ser exhibida en la Casa de la Cultura.
De este acto, existe un documento sellado por el ayuntamiento, quien a través de su área de difusión se comprometió a hacer pública la donación a través de sus redes sociales u otros medios. Pero hasta ahora no lo ha realizado.
Germaín solo cuenta con una fotografía que el personal del ayuntamiento le tomó junto al edil y la obra.
A los cuatro meses de la donación, el autor acudió al ayuntamiento para preguntar por la pieza y para solicitar un documento en el que se acreditara el resguardo y que garantizara que la pieza podría ser reclamada en caso de mal uso. Pero tampoco se lo otorgaron.
Tras su insistencia, Germaín señala que hace poco el edil finalmente le escribió por mensaje para negar que el autor haya donado la pieza a la Casa de la Cultura y que, en cambio, presuntamente fue para el ayuntamiento. Y por lo cual el edil la tenía.
El artista apunta que aunque por error en el documento que dirigió al edil no especifica que la pieza sea para la Casa de la Cultura, sí se especificó verbalmente antes del acto. Además de que la pieza sí lo marca en la parte posterior.
