Wendy Carlos: La pionera de la música electrónica que transformó su vida y se consagró en el anonimato
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Wendy Carlos: La pionera de la música electrónica que transformó su vida y se consagró en el anonimato

Reconocida como una colaboradora clave en la creación del sintetizador Moog, Wendy Carlos dejó un impacto imborrable en la historia de la música electrónica. Además de ser la autora del primer disco de música electrónica que alcanzó las listas de éxitos, también dejó su huella en el mundo del cine al componer las icónicas bandas sonoras de películas como “La naranja mecánica”, “El resplandor” y “Tron”.


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Wendy Carlos es considerada una de las figuras más importantes en la historia de la música electrónica. Nació en 1939 en Pawtucket, Rhode Island, y desde muy joven mostró un talento excepcional para la música. A pesar de enfrentar la disforia de género y las dificultades de la sociedad de la época, Wendy perseveró en su pasión y se convirtió en una pionera en el campo de la música electrónica.

Su colaboración más destacada fue con Robert Moog, el inventor del sintetizador Moog. Wendy asesoró y ayudó en el desarrollo de este instrumento revolucionario, que tuvo un impacto significativo en la música de los años sesenta. Wendy contribuyó con ideas innovadoras para el sintetizador, como los bancos de filtros, los controles deslizantes para ajustar el pitch y un teclado sensible a la presión.

En 1968, Wendy lanzó su primer álbum, “Switched-On Bach”, en el que interpretaba obras de Johann Sebastian Bach utilizando el sintetizador Moog. El álbum fue un éxito sorprendente tanto en críticas como en ventas, convirtiéndose en el segundo álbum de música clásica en alcanzar el estatus de disco de platino en Estados Unidos. Este éxito ayudó a establecer al sintetizador como un instrumento musical legítimo.

A pesar de su éxito, Wendy Carlos experimentó dificultades personales. En paralelo al lanzamiento de su primer álbum, comenzó un tratamiento hormonal para una futura cirugía de reasignación de género. El cambio en su apariencia y la presión mediática resultante la llevaron a recluirse en su casa-estudio y a evitar las apariciones públicas. Wendy sufría de pánico y ansiedad ante la idea de mostrar su verdadero ser al público.

A lo largo de su carrera, Wendy Carlos continuó componiendo música y explorando nuevos territorios musicales. Trabajó en la banda sonora de películas como “La naranja mecánica” y “El resplandor”, creando piezas que contribuyeron al ambiente inquietante y memorable de esas películas.

Aunque su música seguía siendo aclamada, Wendy Carlos vivió una vida privada y reclusa durante casi diez años para ocultar su transición de género al público. Durante ese tiempo, se alejó de la industria musical y se mantuvo alejada de otros músicos y colaboradores. Sin embargo, continuó trabajando en composiciones y publicando música bajo el nombre de Walter Carlos.

En 1972, Wendy finalmente completó su transición de género y se convirtió oficialmente en Wendy Carlos. Aunque continuó componiendo música, siguió viviendo una vida privada y evitando las apariciones públicas. Su contribución a la música electrónica y su influencia en el campo son reconocidas y valoradas hasta el día de hoy.