Los gobiernos municipales de Vilma Martínez y Daniel Méndez, presidentes de Santo Domingo Tehuantepec y Salina Cruz, respectivamente, se mantienen en total anarquía, según ciudadanos de ambos municipios.
Lo anterior, debido a falta de obras públicas e inseguridad que impera en estos municipios istmeños, aunado al crecimiento del comercio informal.
Para el caso de Tehuantepec, este es el cuarto año de gobierno de Vilma Martínez, a quien los pobladores le atribuyen diversas problemáticas sociales sin resolver.
Asimismo, aseguran que presuntamente la alcaldesa con dinero del pueblo ha podido comprar dos camiones pesados para el acarreo de, propiedad de su padre, y también dos camionetas con valor de medio millón cada una.
La acusaron también de tener amigos y familiares en la nómina municipal que suman más de 70 mil pesos mensuales de gastos.
Los habitantes cuestionaron a la alcaldesa por su falta de compromiso con el pueblo y de estar desviando los recursos hacia otros fines, menos a realizar obras sociales que tanto demandan.
En el caso de Salina Cruz, el alcalde Daniel Méndez tiene una ciudad en medio del caos con baches por todo lados que generan inconformidad ciudadana.
La falta de obras públicas también es otro de los problemas que los habitantes exigen.
