El paquete para contener la inflación presentado por el gobierno federal va a tener un impacto limitado, pero preocupa que ante esto el Banco de México relaje su política monetaria, advirtieron especialistas.
“Este paquete tiene mucha creatividad, pero son promesas que además presionan las finanzas públicas (…). Probablemente ya nadie le crea o muy poca gente le crea, mi preocupación es que el Banco Central sí le crea”, comentó Manuel Sánchez González, exsubgobernador del Banco de México (Banxico).
Durante su participación en la sesión Perspectiva Económica Trimestral del IMEF, el exsubgobernador indicó que si Banxico confía en este programa podría relajar su política monetaria, y hacerlo tendría repercusiones económicas importantes.
“Para contener la inflación la junta de gobierno no debe tener temor de que puedan excederse. (…) El único plan antiinflacionario eficiente es el endurecimiento de la política monetaria”, destacó Federico Rubli, vicepresidente del Comité de Estudios Económicos del IMEF.
Sánchez González indicó que es “preocupante” la sugerencia del Presidente de que entre menos suban las tasas de interés es mejor para el país y que el gobierno debe crear condiciones para prevenir que aumenten.
Actualmente la inflación se ubica en 7.72 por ciento, la más alta en 21 años, y las presiones se mantienen al alza.
Rubli también comentó que el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC) contempla una ponderación de 13 por ciento en el Índice de Precios al Consumidor (IPC), lo cual es muy limitado, pero que además no deja muy claro cuál es el costo que van a tener estas acciones.
De acuerdo Hacienda este paquete va a costar 1.4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB); sin embargo, no explican si eso es adicional a los programas que contemplan y ya se gastan o si es adicional.
