Los recortes en el rubro educativo para 2020 demuestran que no basta tener buenas intenciones o simples deseos en papel si no hay recursos económicos suficientes para concretar las aspiraciones, consideró la organización Mexicanos Primero.
“Lo que nosotros vemos en el presupuesto, es que podemos tener muchas buenas aspiraciones, buenos deseos en papel, pero si no hay recursos difícilmente vamos a concretar esas aspiraciones en acciones concretas”, consideró la organización a través de un comunicado.
Añadió que el proyecto del presupuesto para el 2020, no refleja en ningún sentido la voluntad política necesaria para cumplir con esas obligaciones del estado en cuanto a educación inclusiva.
Consideró que es incongruente el discurso federal en torno al apoyo a la educación, al proponer una disminución de recursos en el proyecto de Presupuesto de Egresos para el 2020.
Manifestó que la conclusión, al analizarse 41 programas educativos, fue que no se contará con el recurso para abastecerlos, ya que la propuesta de presupuesto no refleja la voluntad política prometida para cumplir con el artículo tercero constitucional.
Resaltó la incongruencia que se refleja en torno a lo que marca la reforma educativa, los discursos oficiales del Gobierno federal y lo propuesto para el presupuesto del año entrante.
Sostuvo que plantean recortar al menos 5 mil millones de pesos para la educación básica, de ahí la necesidad de que se recuperen en la Cámara de Diputados, además de que se cuide en dónde se estará gastando el recurso, a fin de cumplir con las metas que plantea la nueva reforma educativa.
Relativo al nivel preescolar, anotó que es el sector más vulnerado, ya que se propone un recorte de 5.7% para el año entrante, a pesar de que en este 2019 se recortó más de un 42 por ciento el recurso.
De 4 mil 370 millones pasó a 3 mil millones y este año baja a 2 mil 900 millones, lamentó.
Enfatizó el tema de la formación de los maestros, donde hay recortes para la formación inicial que reciben las escuelas normales, así como de formación continua, acciones que describió como regresión a un presupuesto del siglo pasado.
Reiteró el problema de las escuelas de tiempo completo, donde se prevén recortes del 52 %, lo que dejaría inoperable el programa.
Consideró que quitar los recursos de programas que están funcionando es un error, y todos estos recortes se deben a que se están destinando recursos a las becas que se están entregando para media superior y superior.
