¿Sin educación qué nos espera?
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¿Sin educación qué nos espera?

 


Sorprende el juego político que desarrolla el gobierno “de la esperanza” en relación a la Educación Pública. Asoma la perversa intención del presidente electo AMLO, de partir al magisterio nacional y a su sindicato en cuatro frentes: el SNTE de Elba Esther y el de Juan Díaz de la Torre. También en dos a la CNTE de los mercenarios del cártel 22 donde la ambición los empieza a fraccionar.

Un juego político muy tenebroso el del divide y vencerás. Esta estrategia si bien puede resultar beneficioso para los planes del próximo presidente de la República, podría hundir más la endeble educación pública en nuestro país, principalmente en Oaxaca, donde padecemos los más bajos índices de aprovechamiento escolar. No hay que olvidar que esta entidad ha sido usada como laboratorio político en la feroz lucha por el control del sindicato magisterial más numeroso en Latinoamérica. Tampoco olvidar que en esta escaramuza, los dirigentes del cártel 22-CNTE han afinado su papel de mercenarios. Durante sus más de 35 años de lo que llaman movimiento “democrático” magisterial, han aprendido a vender sus servicios políticos al mejor postor entre los partidos y grupos de poder.

El tamaño de la nueva pugna por el control magisterial, asomó a partir del anuncio público de Elba Esther de regresar por sus fueros. “Yo tengo el control de los maestros, Juan Díaz tiene el control de la chequera del sindicato”, dijo, retadora, la poderosa dama al abrir el frente de guerra y anunciar sus intenciones. Obvio resultaría decir qué tal anuncio, seguramente, lo hizo con la autorización del presidente electo. A través de su virtual titular de la SEP, Esteban Moctezuma, expresó, públicamente, que “el presidente electo no ve con malos ojos” el retorno de Elba Esther.
En este juego maquiavélico, AMLO y sus operadores, el pasado fin de semana se reunieron en la casa de transición con los líderes más vistos de la Coordinadora. Al frente iba Eloy López, de la Sección 22 considerada el brazo golpeador y paramilitar de la CNTE.

Todo indica que la intención del futuro presidente al recibir a los rijosos disidentes del SNTE es para decirles, en tono eufemístico, que la cacareada reforma educativa no será a su gusto. Y parece que así lo entendieron.

El tono de su nuevo discurso así lo manifiesta. Dejaron a un lado sus intenciones de boicotear el foro educativo en Oaxaca y, sobre todo, de sus intenciones de monopolizar el control del evento.
De inmediato emitieron un comunicado donde anuncian su incorporación “al diálogo a que nos ha convocado el presidente AMLO”.

Los cabecillas de la coordinadora aparecen con nueva actitud. Así lo manifiestan en un comunicado donde expresan que “fue una reunión de trabajo institucional por la aprobación de la reforma educativa a fin de que las secciones que aglutina la CNTE establezcan con el gobierno electo la agenda de trabajo para la instalación de las mesas en la Comisión Nacional Única de negociación en la sede de la CNTE para elaborar la agenda que se entregará al gobierno entrante”.

Esos son
Este parece ser un acuerdo civilizado, pero en el seno del cártel 22 la realidad es otra. Los grupos están decididos a autoinmolarse por el botín que significa cada uno de los acuerdos que hacen las tribus magisteriales en lo particular y de acuerdo con sus propios intereses.

La siguiente nota, de María Cabadas, prueba que entre los grupos que conforman el cártel 22, no hay principios, menos ideales o algún interés por la educación pública. Los mueve sólo su actitud mercenaria.

Al mejor postor
Dominga Escobar Luis, líder del grupo de Los Pozoleros, también conocido como Bloque Negro, quien en junio de 2015 se le acusó de la toma violenta de casillas, de la quema de papelería electoral y del robo de urnas en los comicios que se celebraron en Oaxaca, se integró al organismo civil Maestros por México (MxM), que de la mano de Elba Esther Gordillo, se disputa el control del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).

La reaparición de Escobar fue el martes en el mitin de MxM afuera de la Cámara de Diputados para exigir que se abrogue la Reforma Educativa, al lado del exlíder de la Sección 15 del SNTE en Hidalgo, Moisés Jiménez, así como la cabeza principal de este organismo civil, Tomás Vázquez Vigil.

Ella tiene el número de plaza 078712E0281000400971 y está adscrita a la escuela primaria JuujkyAjte’n, ubicada en el municipio de San Pedro y San Pablo Ayutla, pero no da clases y sigue cobrando como maestra de educación básica. En estos últimos tres años, la SEP le pagó 515 mil 357 pesos, según cifras del Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa y Gasto Operativo (Fone). Interesante el tema mañana continuamos.

En entrevista con ContraRéplica, Escobar aseguró que MxM cuenta hasta el momento con 10 coordinaciones en Oaxaca y trabaja para acrecentar el número de profesores sumados.

“Ahorita Oaxaca es un campo minado”, dijo al referirse a la disputa que existe entre la Sección 22 de la CNTE, la Sección 59 del SNTE y el Sindicato Independiente de Trabajadores de la Educación de México, por mantener el control educativo en esa entidad, que gobierna Alejandro Murat. (Interesante el tema mañana continuamos)

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