A un mes de su muerte, piden justicia para Érika
Denuncian también que al bebé de Érika le han negado su esquema de vacunación pese a la temporada invernal que está dejando temperaturas muy bajas.
Érika Ramírez Cabrera podría ser un caso de impunidad, ya que a más de un mes de su muerte por una posible desatención en la recta final de su embarazo, no se ha dado ninguna audiencia de debate y la clínica de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) involucrada, pretende desvirtuar los hechos, denunció la mamá de la joven, Felícitas Cabrera.
Bajo el expediente 35/11 en la Fiscalía General de Oaxaca se encuentra esta muerte materna y de acuerdo con “Feli”, la información que la Clínica de Salud con Servicios Ampliados (Cessas) de San Jacinto Amilpas, ofreció a la autoridad está tergiversada.
“Dicen que Érika se golpeó varias veces la cabeza en la pared, que como ‘chiva loca’ anduvo dando vueltas y que no sufrió preclamsia como se refiere en el dictamen del Hospital Civil donde murió”, expresó.
De acuerdo con la mamá, su hija ingresó al Hospital Civil el 5 de octubre por complicaciones en su embarazo, después de que no fue aceptada en el centro de salud, donde el personal no cubrió con el protocolo de revisión, pese a llevar síntomas graves.
Ante eso, reiteró su exigencia a que se finquen responsabilidades a la directora y doctora del Cessas por su omisión en la atención a la adolescente que tenía 8 meses de embarazo y urgía de atención.
“Ahora, el personal pretende desvirtuar la información, aseguran que sí la revisaron y que mi hija se golpeó la cabeza en la pared por eso sufrió muerte cerebral”.
Ante la Fiscalía, el personal médico supuestamente puso el material de circuito cerrado como una prueba para deslindarse de responsabilidades, cuando es un elemento manipulable, dijo Felícitas.
También denunció que al bebé de Érika le han negado su esquema de vacunación pese a la temporada invernal que está dejando temperaturas muy bajas.
Por eso, pidió el apoyo de la sociedad civil para cubrir los gastos de un abogado que lleve el caso y se haga justicia por la muerte de la adolescente.
“No quiero que el sistema de salud tape a este personal, porque su impericia provocó la muerte de mi hija”, refirió.
