Una prueba sencilla, rápida y gratuita podría marcar la diferencia entre la vida y la muerte para miles de mujeres oaxaqueñas: el Papanicolaou, también conocido como citología cervical, permite detectar a tiempo lesiones precancerosas en el cuello del útero y prevenir el desarrollo del cáncer cervicouterino, uno de los más comunes y mortales entre la población femenina en México.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, en Oaxaca el cáncer cervicouterino continúa siendo una de las principales causas de muerte en mujeres mayores de 25 años, pese a que puede prevenirse con un chequeo regular.
La prueba consiste en recolectar una pequeña muestra de células del cuello uterino para analizarla en un laboratorio. El procedimiento no duele, dura menos de cinco minutos y está disponible de forma gratuita en centros de salud públicos de todo el estado.
“Muchas mujeres no presentan síntomas hasta que la enfermedad está avanzada. Por eso es vital acudir al médico de manera preventiva, no cuando ya es demasiado tarde”, advierten médicos
¿Cuándo hacerse el Papanicolaou?
Las autoridades de salud recomiendan realizar esta prueba cada uno a tres años a partir de los 25 años o desde el inicio de la vida sexual activa. En algunos casos, se complementa con la prueba del Virus del Papiloma Humano (VPH), principal causa del cáncer cervicouterino.
Un acto de amor propio
Campañas como “Tócate, Cuídate, Ámate” impulsadas por los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), buscan concientizar sobre la importancia de la detección oportuna. A lo largo del año, brigadas móviles visitan comunidades rurales y colonias urbanas marginadas para acercar estos servicios a todas las mujeres, sin importar su condición económica o lugar de residencia.
El llamado es claro: no dejar pasar más tiempo. Hacerse el Papanicolaou no solo cuida tu salud, sino que puede salvar tu vida.