¿Qué beneficios tiene la papaya?

Por su agradable sabor y a que es muy fácil de conseguir, la papaya es una de las frutas más populares y consumidas, además es muy recomendada en una gran variedad de dietas gracias a sus grandes beneficios.

La papaya es una fruta suave y regularmente muy jugosa, por lo que se puede consumir de diversas maneras, principalmente picada en pequeños pedazos, en coctel junto a otras frutas o en agua fresca.

Los nutrientes que se encuentran en la papaya tienen una variedad de efectos positivos para la salud, ya que  pueden ayudar a proteger contra una serie de enfermedades, así como a algunos malestares. Es así que estos son algunos de sus mayores beneficios:

• Favorece la digestión

La papaya contiene una enzima llamada papaína que ayuda a la digestión; asimismo, gracias al alto contenido de fibra y agua, previene el estreñimiento.

• Previene el asma y el cáncer de próstata

El riesgo de desarrollar asma es menor en personas que consumen betacaroteno, ingrediente que tiene a la papaya; este nutriente también puede tener una función protectora contra el cáncer de próstata, según un estudio publicado en la revista Cancer Epidemiology and Prevention Biomarkers.

• Fortalece los huesos

Contiene vitamina K, la cual mejora la absorción de calcio, por lo que esto es benéfico para la salud ósea.

• Apoya el sistema inmune

Tiene un alto contenido en Vitamina C, incluso más que una naranja, es así que ayuda a mantener las defensas del organismo.

• Ideal para diabéticos

Algunos estudios han comprobado que esta fruta beneficia a equilibrar los niveles de azúcar en sangre, lípidos, además de insulina.

• Mantiene un cabello saludable

La papaya contiene vitamina A, un nutriente necesario para la producción de sebo, que mantiene el cabello hidratado.

• Benéfica para la piel

La vitamina A también es necesaria para el crecimiento de todos los tejidos corporales, incluyendo la piel, por lo que beneficia la cicatrización y mejora la salud de la piel.

Al momento de consumir una papaya, trata de elegir aquellas que son frescas, con piel de color naranja rojiza y que sean suaves al tacto. Para aprovechar al máximo sus nutrientes y se consigan sus grandes beneficios, se recomienda comerla al natural o en agua sin azúcar, pero también se puede combinar en jugo con otras frutas como piña, naranja o limón.