Desagradable sorpresa se llevó Domingo Santiago Sarmiento en las oficinas de la Secretaría de Movilidad (Semovi), donde le informaron que las placas de su motocicleta ya no le pertenecían porque la unidad de motor ya la había vendido. Lo más denigrante es que quien ahora aparece como dueña es la esposa de un empleado de esta Secretaría.
Desde los primeros días de este año, Santiago Sarmiento acudió a dichas oficinas para pagar la tenencia, sin embargo, fue informado que no podía hacer el trámite porque ya no era el dueño de la motocicleta.
Sorprendido el joven porque él jamás había realizado alguna operación de compra-venta, solicitó mayor información, pero desde ese momento empezó a vivir un calvario con vueltas y vueltas tanto en Semovi, como en la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) y de la Defensoría de los Derechos Humanos de Oaxaca (DDHPO).
Realizando sus propias investigaciones, se enteró que las placas ahora están a nombre de Andrea Enríquez Toral, familiar de un servidor público de la Secretaría de Movilidad.
Al no tener respuestas en esta Secretaría y con todos los documentos en regla que lo avalan como legítimo dueño, procedió a denunciar los hechos ante la FGEO, donde la investigación se desarrolla; así como ante la Defensoría de los Derechos Humanos de Oaxaca (DDHPO) ya que le fueron violentados sus derechos.
Las características de la motocicleta son marca Honda, modelo 2022, placas 42 SPC3. número de serie LALMD4399N3101568 y número de motor MD4E2035998.
Durante sus recorridos en los pasillos de Semovi, el denunciante se ha enterado que no es la única persona que vive esta injusticia, incluso fue testigo cuando una mujer se enfrentó a un funcionario por el mismo motivo y de lo cual también ya obra una carpeta de investigación que se expondrá a la luz pública.
Al fiscal general y al gobernador del estado, Domingo Santiago Sarmiento pide que se le haga justicia, ya que la motocicleta que con tanto esfuerzo y sacrificio adquirió honradamente es su medio de transporte para ir a su trabajo.
