Han pasado 15 días desde que Guillermina López Rivera y Eusebio Nolasco Joaquín, matrimonio originario de San Juan Bautista Tuxtepec, desaparecieron sin dejar rastro tras salir a realizar un trámite de compraventa de un terreno. Desde entonces, la incertidumbre reina entre sus familiares, mientras que las autoridades de Oaxaca y Veracruz no han presentado avances sustanciales en la investigación.
Según las fichas de búsqueda, ambos fueron vistos por última vez el 18 de junio en la colonia El Progreso, en la ciudad de Tuxtepec. La última información que se tiene es que salieron juntos ese día para atender una operación relacionada con un predio. Pero, nunca regresaron ni volvieron a comunicarse.
UN MATRIMONIO CONOCIDO EN LA REGIÓN
Guillermina y Eusebio son padres de Ilse Mariela Nolasco, ex candidata del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) a la diputación local por el distrito de Tuxtepec. La familia ha sido activa en la vida pública local. Lo que hace aún más inquietante la ausencia de pistas y respuestas.
A pesar de la emisión de fichas oficiales de búsqueda que incluyen descripción física y vestimenta, no hay datos confirmados sobre su paradero, ni se ha informado de alguna línea sólida de investigación. La familia ha señalado que no existe coordinación efectiva entre las fiscalías de Oaxaca y Veracruz. Lo cual retrasa las labores de localización y búsqueda inmediata.
FAMILIA EXIGE ACCIÓN, NO INDIFERENCIA
La familia ha difundido múltiples llamados en redes sociales y medios de comunicación para solicitar apoyo ciudadano y presionar a las autoridades.
“Lo que más duele es la falta de respuesta oficial. No tenemos información. No sabemos si los están buscando realmente”, expresó un familiar cercano.
El caso se suma a una larga lista de desapariciones en la región de la Cuenca del Papaloapan. Una zona que ha experimentado un aumento sostenido en los índices de violencia, desaparición forzada y delitos patrimoniales. Sin embargo, la respuesta institucional suele ser lenta o inexistente.
OTRA DESAPARICIÓN EN MEDIO DE LA INDIFERENCIA OFICIAL
La desaparición del matrimonio no ha sido visibilizada por autoridades de alto nivel, ni ha generado operativos especiales en la región. Lo que para la familia representa una urgencia vital, para el aparato institucional parece ser apenas un expediente más.
La crítica de activistas y colectivos de búsqueda apunta al abandono sistemático de las víctimas, la falta de protocolos eficaces y la carencia de voluntad política para actuar con rapidez en los primeros momentos, considerados cruciales en toda desaparición.
URGE ROMPER EL SILENCIO
La sociedad civil juega un papel clave en este tipo de casos. La difusión de las fichas de búsqueda, la presión en redes sociales y la visibilización en medios han sido, históricamente, las herramientas que logran activar —o al menos presionar— a las autoridades.
Por ahora, la exigencia es clara: que las Fiscalías actúen de manera conjunta, que se informe públicamente el avance de la investigación y que se movilicen recursos para localizar con vida a Guillermina y Eusebio.
Mientras tanto, la familia sigue esperando una llamada, una pista, una respuesta. Porque cada minuto cuenta.