La tranquilidad nocturna de San Andrés Huaxpaltepec, en la región Costa de Oaxaca, fue interrumpida por un hecho que ha conmocionado a la comunidad: una dolescente de apenas 14 años fue asesinado la noche de este domingo frente al panteón municipal, en plena zona urbana del municipio.
El ataque
La víctima fue identificada como Jesús Daniel “N”, originario y vecino de esta localidad costera. El ataque se registró alrededor de las 21:00 horas, según los primeros informes policiacos. Familiares del menor acudieron al lugar minutos después y confirmaron su identidad ante las autoridades.
Pese al despliegue inicial de elementos de la Policía Municipal, la Guardia Nacional y la Policía Estatal, no se ha detenido a ninguna persona en relación con el homicidio. La Vicefiscalía Regional de la Costa, órgano dependiente de la Fiscalía General del Estado, ha iniciado las investigaciones para tratar de esclarecer los hechos y dar con los responsables.
La zona fue acordonada para permitir el levantamiento del cuerpo y la recolección de indicios, pero hasta el cierre de esta edición no hay información oficial sobre líneas de investigación, móviles o posibles sospechosos.
Indignación y miedo entre la población
La noticia del crimen se esparció rápidamente entre los habitantes del municipio. Con ello, generando un ambiente de indignación, dolor y miedo. La comunidad local exige que el caso no quede impune y que se refuercen las acciones de seguridad. Especialmente para proteger a niños y adolescentes.
Este homicidio no solo evidencia la vulnerabilidad de los jóvenes en contextos rurales, sino que pone en tela de juicio la eficacia de los mecanismos de prevención del delito en municipios pequeños, donde la presencia policial suele ser escasa y la impunidad una constante.
La violencia alcanza a los más jóvenes
El asesinato de Jesús Daniel no es un caso aislado. En varias regiones de Oaxaca, los menores de edad están siendo víctimas directas de la violencia. Ya sea como blancos de agresiones o como testigos de entornos inseguros. Las cifras oficiales sobre homicidios dolosos en la entidad continúan en aumento. Mientras tanto, la respuesta institucional permanece limitada y, en muchos casos, reactiva.
La falta de resultados inmediatos en la investigación de este caso preocupa a la población,. La cual ha comenzado a organizarse en redes comunitarias para exigir avances concretos y mayor vigilancia.
Finalmente, el crimen de este adolescente se suma a una larga lista de hechos violentos que sacuden al estado y la Costa oaxaqueña. Lo que refleja una crisis de seguridad que no distingue edad ni geografía.