Dan último adiós a madre e hija en Santo Domingo Barrio Bajo
El cortejo fúnebre salió de la casa de las víctimas y luego los restos fueron depositados en el panteón de la Villa de Etla
Con música de banda y entonando las notas musicales de la feria de Cepillín, en el bosque de la China y la melodía de Qué bonita vecindad, se realizó la tirada de dulces en el último adiós de Melisa y a su mamá Alma Rosa, de 4 y 22 años, respectivamente.
El cortejo fúnebre partió antes del mediodía del domicilio ubicado en prolongación de Independencia de Santo Domingo Barrio Bajo, Etla, con destino a la iglesia de la Villa de Etla, en donde el padre pidió por las almas de Alma y Melisa.
Al finalizar la misa de cuerpo presente, los ataúdes salieron en hombros de familiares y amigos con rumbo al panteón municipal de la Villa de Etla, en el camino al camposanto lar personas que acompañaban hacía alto y bailaban las melodías entonadas por la banda musical.
Los rostros tristes de los familiares de las fallecidas se podían contemplar y al llegar a donde sería su última morada, las lágrimas de los presentes no se hicieron esperar más cuando se acercó la hora de entregar los cuerpos a la madre tierra. Tras el último puño de tierra, fue entonado el Dios Nunca Muere para despedir a madre e hija.
Tal como se lo informó, la mamá e hija fallecieron el pasado sábado en un accidente vehicular sobre la Carretera Federal 190, a la altura del crucero de la Súpercarretera 135-D.
Eduardo de ocupación herrero, es el nombre de quien conducía y responsable del accidente, de acuerdo con los testimonios de la familia, era pareja sentimental de Alma con quien llevaba 4 meses de noviazgo.
Ante la fuga del responsable, familiares radicados en Estados Unidos ofrecen una recompensa para quien dé informes del presunto homicida y sea castigado.