La conquista de México
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Opinión

Toltecáyotl

La conquista de México

 


El Estado le oculta la verdad histórica al pueblo, y le habla solamente del día de “Los Niños Héroes”, pero no se menciona explícitamente que fuimos agredidos injustamente por los vecinos del Norte.

 

Seguramente que existen muchas razones por las cuales los europeos iniciaron la invasión al continente Abyanáhuac, que, por cierto, por la colonización mental en la que nos hemos educado, la nombramos sin vergüenza, “la conquista de México”. Si fuéramos un pueblo educado en un pensamiento crítico, analítico y descolonizado, no aceptaríamos esa forma de referirnos a la agresión.

Al llamar a la agresión, “la conquista”, es como si nosotros fuéramos españoles. Para ellos, si fue una conquista, un logro, un bien que les aportó oro, plata, mano de obra esclava, territorios, riqueza en muchos sentidos durante tres siglos.

Para aquellos que tengan una conciencia identitaria, para quienes no se piensen “españoles o euromexicanos”, para los que poseen dignidad, la invasión implica un inadmisible hecho sustentado en la injusticia, la muerte, el sufrimiento, el despojo y la pérdida de la libertad y la autodeterminación.

Una mente cretina y cínica podrá afirmar que, “eso ya pasó, y que México es un país mestizo”. Pero la verdad es que, por no tener conciencia de lo que pasó, por no saber qué fue lo que en verdad sucedió, qué fue lo que se destruyó, “la conquista”, se sigue dando hasta nuestros días. Cuando uno se pregunta por qué en México la gente más rica y la que vive mejor, es aquella que desciende de extranjeros.

Cuando uno busca la respuesta de, por qué en este país existen 17 familias que poseen la riqueza suficiente para pagar los ochenta mil pesos que cada mexicano debe por concepto de la deuda externa, la respuesta está justamente en un sistema económico, político y social, que permite que unos cuantos exploten a todos e impunemente se queden con todo.

Cuando usted se pregunta, por qué el 72% del pueblo no tiene las condiciones de bienestar para vivir con decoro, la respuesta es otra vez la misma. Cuando usted se cuestiona la realidad, sin aceptarla mansamente, entonces usted empieza a tener conciencia histórica.

El problema de no “ver la conquista de México” como una desgracia, es que, -ella misma-, se nos hace lo común. Lo que “es”, es lo que siempre ha sido. Porque desde niño, en su casa se dijo así. Porque en la escuela así le enseñaron la historia los profesores, sin ninguna vergüenza.

Porque en el libro de texto de la SEP así está escrito. Porque en la televisión y en la radio, así se refieren a esta tragedia. Esto se debe a que, los que poseen el verdadero poder, no quieren que el pueblo tome conciencia histórica.

En EU en los libros de historia a los niños se les dice que, en 1847, México atacó a su país y que, el ejército tuvo que defender su nación. Allá, sigue vivo eso de “Recuerda el Álamo”. Aquí en México el Estado le oculta la verdad histórica al pueblo, y le habla solamente del día de “Los Niños Héroes”, pero no se menciona explícitamente que fuimos agredidos injustamente por los vecinos del Norte, que estuvimos ocupados por el ejército de EU un año.

Que su bandera ondeó en todos los edificios públicos, comenzando con el Palacio Nacional, y que, nos despojaron de la mitad del territorio nacional. Eso no se dice, eso no se recuerda.

México es un país necolonial. Las relaciones políticas, económicas, educativas, culturales y sociales son eminentemente de carácter colonial. El hecho que seamos una sociedad clasista, racista, injusta, violenta, es justamente porque vivimos en los valores y principios que se tenían en el siglo XVI, en las relaciones entre españoles y anahuacas, es decir con propiedad, entre invasores e invadidos.

No es casual que, en 2019, las personas más ricas y poderosas del país, tengan un origen extranjero relativamente reciente, y que, las personas más pobres y desamparadas, vengan de los llamados “pueblos originarios”. Esto nos demuestra que “la conquista sigue y sigue y que la injusticia sigue”.

Aquí vemos como algo común, normal e histórico, que unos cuantos tengan todo y la mayoría no tenga nada. Por falta, justamente, de la memoria y conciencia histórica, la gente no se indigna y no hace nada por cambiar la cultura colonial. Por el contrario, “progresar” es explotar, es despojar, aprovecharse del sistema colonial. Si no tranzas no avanzas. Para sobrevivir en el sistema colonial debe la gente ser “conquistado-conquistador y colonizado-colonizador”, es decir, tirarse a los pies de los poderosos, y pisar hasta exprimir a los que “están abajo” en el sistema de castas.

Esta es la razón por la cual, se requiere descolonizar la historia. Si en verdad se busca una “verdadera transformación” del país, se requiere primero, cambiar la visión colonial que tenemos del mundo y de la vida. Se requiere conocer la “verdadera historia del México profundo”. Conocer a profundidad quienes fueron nuestros antepasados, cuáles sus logros, cuáles sus alcances.

Por qué fueron nuestros Viejos Abuelos, la civilización ancestral que alcanzó la más alta calidad de vida para todos sus pueblos. Lo que no permiten los poderosos es que el pueblo salga de su amnesia histórica y cultural, porque sería el despertar y el renacimiento de nuestra milenaria civilización.

 

Educayotl AC. Descolonizar es dignificar.
wwww.toltecayotl.org