Al leer estas líneas querida lectora, amigo lector, estaremos en el último día del año de 2022 y el domingo uno de enero, quién lo dijera, ya será el 2023.
Quizás, el año que termina este sábado, sea el más sangriento del Siglo XXI, con cerca de doscientos mil asesinatos en todo el país.
Por lo que se refiere a Oaxaca, domina el problema de la etnia Triqui, sin embargo, el Gobierno hace sus esfuerzos para solucionarlo con reuniones y diálogos con las tres organizaciones MULT, MULTI Y UBISORT, que agrupan a los rijosos, que a pesar de todo siguen aferrados a sus líderes y ambiciones de grupo; a mi juicio por la explotación de sus bosques y por dominar el ambulantaje de sus miembros en la Ciudad de Oaxaca de Juárez.
Mientras no se encuentre un sitio para sus comercios, el problema subsistirá por siempre. Por otro lado, el problema de la disposición final de la basura sigue en muchas calles de los municipios conurbados en nuestra capital y en algunos lugares el muladar es impresionante.
Parece fácil la solución técnica, en efecto el Relleno Sanitario o la industrialización son inobjetables, el problema es dónde llevarlo a cabo.
En mi opinión, la solución al ser cosa de veinticinco municipios de los Valles Centrales, el asunto además de municipal, es del Gobierno del Estado, y en ese orden de ideas, con la energía manifiesta del señor gobernador Salomón Jara Cruz, debiera expropiarse el terreno de la colonia Vicente Guerrero por los rumbos de Zaachila y seguir con el relleno sanitario, ya que se sabe que aún existe una área suficiente para muchos años, además el mismo municipio de Zaachila, manifiesta el mismo problema..
En ese contexto, opino libremente que los municipios solos no podrán resolver este asunto que crece por todos lados día con día.
Yo también soy Pueblo.
Por allí nos encontraremos.
