AMH: Una decisión histórica
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Editorial

AMH: Una decisión histórica

 


Nobleza obliga reconocer que no son sólo críticas al gobierno de Alejandro Murat. Sin duda alguna el ejecutivo estatal ha tomado decisiones acertadas e inclusive inéditas. Aplaudimos dos de los últimos días: la de disponer el desalojo de los indígenas chatinos que tenían tomado el paraje conocido como “El Pedimento” y el posterior blindaje de parte de la Policía Estatal a los miles y miles de peregrinos que arriban durante todo el mes de diciembre al Santuario de la Virgen de Juquila, con motivo de este festejo anual. La segunda decisión, luego de reunirse con las cúpulas empresariales del estado y en apoyo a los mismos, fue la de retirar de su propuesta fiscal de gravar con al menos cuatro nuevos impuestos a los oaxaqueños.
No es propósito de este espacio editorial, que refleja la opinión de directivos y editores de EL IMPARCIAL. El Mejor diario de Oaxaca, hacer panegíricos, loas o quemar incienso al ejecutivo estatal. Sin embargo, nobleza obliga reconocer que haber cancelado la propuesta enviada ante el Congreso local, respecto a poner cargas impositivas en ciertos rubros, se trató de una medida histórica y de congruencia política con los sectores productivos de la entidad, particularmente con las cámaras de servicios turísticos, de la industria del mezcal y de los colegios de profesionistas, todos ellos motivo de los nuevos impuestos.
Es evidente que quienes estuvieron detrás de dicha propuesta no conocen la realidad oaxaqueña o simplemente jamás han estado inmersos en la problemática económica que enfrentan los sectores más vulnerables. Oaxaca sigue a la zaga del desarrollo nacional. Cuenta con un rezago en educación, salud e índice de desarrollo humano, que no han sido superados. Por más optimismo en las cuentas oficiales, seguimos arrastrando una pobreza recurrente. Los sectores que algún día fueron pujantes y generadores de empleos, simplemente están hoy en día en la lona, por ejemplo, la industria de la construcción. La razón es simple: desde la administración pasada toda la obra pública se concentró en tres o cuatro empresas foráneas. A las locales sólo lesasignaban minucias; los constructores tenían que financiar sus obras, para después peregrinar para que les pagaran.
Todo ello, junto con otros factores, ha creado el caldo de cultivo de una descapitalización grave. He ahí el por qué la medida adoptada por Murat Hinojosa, ha sido bien recibida y aplaudida. Sin duda pues, se trata de una decisión histórica.

Diálogo, pero también la ley

A raíz de la demanda de justicia y paz social de los pobladores de Santa Catarina Juquila, acorralados por el bloqueo carretero que impusieron sus vecinos de Santiago Yaitepec, en esa añeja disputa que tienen por el paraje “El Pedimento”, en una acción plausible, el gobierno de Alejandro Murat dispuso aplicar la ley y que las corporaciones policiales, en coordinación con la Guardia Nacional, desalojaran dicho predio. La razón jurídica le asume a Juquila que, según datos, son quienes tienen los títulos de propiedad, además de que, históricamente, han sido propietarios del citado lugar religioso. Ello ha generado constantes roces violentos con sus vecinos chatinos.
Manejados por personajes conocidos como incendiarios de las comunidades indígenas, vecinos de Yaitepec han bloqueado el puente ubicado en Río Manteca, de manera constante. Con el argumento de que llevarán a cabo trabajos de desmonte o tequio, cierran el único acceso que por el lado de la carretera Oaxaca-Puerto Escondido, permite llegar a Juquila. Y lo han hecho con dolo y mala fe, como lo hicieron en Semana Santa y en días recientes, sabidos de que son las temporadas de mayor afluencia de peregrinos que llegan al Santuario de la Virgen, buscando con ello golpear la economía de los juquileños. Se sabe que los peregrinos que llegan de todas partes del país, el estado y el extranjero, son muchos miles.
Haciendo alarde de una insultante impunidad, hace poco más de una semana, un grupo armado de Yaitepec penetró en “El Pedimento”, despojando no sólo a los comerciantes de sus puestos, sino que en un franco desafío al Estado, robó cartuchos de armas de fuego a elementos de la Policía Estatal. Por prudencia no se llegó a un enfrentamiento. Pero dicho grupo ha operado como célula delictiva, que ha amenazado la paz de sus vecinos, entre ellos la citada comunidad de Juquila. El sábado pasado, sin soslayar que es necesario el diálogo y la conciliación entre ambas comunidades se procedió al desalojo. Se habló de una mujer de la tercera edad fallecida. Sin embargo, la misma autoridad desmintió la especie, al reconocer que la misma había fallecido antes del desalojo. Pues bien, se ha dado un paso importante para mantener la calma, pero es casi seguro que la citada comunidad volverá una y otra vez a utilizar elsobado método del bloqueo y continuará con sus acciones beligerantes. En virtud de ello se impone la continuación del diálogo, pero con la ley en la mano.