La desvergüenza del Verde

Para qué tanto brinco, estando el suelo tan parejo, le dicen al senador Manuel (Güero) Velasco, en torno a su pretendida candidatura presidencial si ni siquiera su propio partido lo considera aspirante.

El Güero se auto postuló como aspirante presidencial y lo negoció con la cúpula de Morena, ya que, a cambio de bajar a Evaristo Lenin Pérez como candidato del Verde en Coahuila, recibiría la inclusión dentro de las corcholatas, pero en calidad de colado, como se mencionan en la obra de teatro, La Casa de la Bandida.

El mismo Presidente López Obrador quien le guarda una gran estima al exgobernador de Chiapas, por la gran relación que tuvo con su abuelo, fallecido hace un par de años, lo metió con calzador entre los aspirantes presidenciales de la alianza que integrarán Morena, PT y Verde.

Velasco se entusiasmó, pero pronto quedó evidenciado que ni siquiera su partido lo respalda, ya que en reunión del Partido Verde los participantes manifestaron que su carta es Claudia Sheinbaum, quien no forma parte del organismo político, pero sí de Morena, partido del que saldrá el candidato presidencial.

La apuesta por Manuel Velasco es una más de las fantasías que tienen algunos de los políticos mexicanos que se aceleran y dan cuerda ellos mismos, sin que nade los considere para ese salto que constituye enarbolar a los tres partidos del oficialismo.

La realidad es que el Partido Verde no tiene posibilidad alguna de poner candidato presidencial ni yendo solo, pero sí de sumarse a la alianza del actual partido mayoritario.

Se trata de encarecer su amor, tarea que para los verdes es muy sencilla, ya que ellos están conscientes de que ir solos les da un fuerte golpe que los llevaría a la posibilidad de perder el registro, por lo que prefieren sumarse (como lo han hecho siempre) a un partido con el que puedan competir y hasta obtener mayores beneficios, con una buena dotación de curules y escaños para el 2024…Comenzó el deslizamiento de nombres para ocupar las posiciones que quedarán vacías en cuanto las corcholatas se decanten por competir por la candidatura presidencial.

Manuel Velasco es uno de los codueños de la franquicia, pero ante el alejamiento del verdadero propietario, Jorge Emilio González, el Güero es quien toma la mayor parte de las decisiones políticas.

Por eso resulta sorprenden que los militantes y dirigentes del Verde le hayan ofrecido amor eterno a Claudia, cuando uno de sus principales dirigentes anhela la candidatura presidencial.

Las negociaciones del Verde con Morena, apuntan al encarecimiento de sus favores, ya que los respaldan la baja de su candidato a gobernador en Coahuila y los casi 700 mil votos obtenidos en el Estado de México que es casi la diferencia entre los votos de la alianza y los que obtuvo Morena.

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Hay personas que les gustan los desafíos y enfrentarlos es una de sus misiones. Así fue como José Luis Montañez, periodista de profesión, convirtió uno de ellos en un triunfo, al tornarse en guionista, productor e inversionista de la obra La Casa de la Bandida, en que participan destacados actores y actrices y periodistas con gran reconocimiento que sostiene un sesudo debate en medio del desarrollo de la obra que está teniendo gran éxito. Participan el propio Montañez, Salvador Martínez, Paco Reynoso, Víctor Sánchez Baños, Roberto Vizcaíno, el que escribe y Lord Molécula (Carlos Pozos), además de Mary Carmen de la Peña. Ruth Mendoza, Martín Muñoz, Benito Castro, Jorge Nieto y Jorge Ibarra, entre otros.

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