Parálisis administrativa
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Opinión

BARATARIA

Parálisis administrativa

 


Un buen tanque de oxígeno financiero por parte de la Federación ha recibido durante el primer semestre del año el gobierno del estado de Oaxaca luego del gran apretón sufrido en 2021. Leemos en EL IMPARCIAL que eso representó un incremento de 13.12% en aportaciones federales con respecto a 2022, al cierre de junio de este año. Buena noticia, sin duda.

Por participaciones, aportaciones, convenios, incentivos derivados de la colaboración fiscal, transferencias, asignaciones, subsidios y subvenciones, pensiones y jubilaciones el monto recibido por el gobierno estatal ascendió a más de 44 mil 274 millones de pesos. Sin embargo, ello no se ve reflejado en mayor, mejor y gasto e inversiones públicas de calidad.

De acuerdo al Informe de Resultados de la Fiscalización del Avance de la Cuenta Pública Estatal del primero y segundo semestres de 2022, el Órgano Superior de Fiscalización (OSFE) da cuenta de un subejercicio entre el gasto ampliado asignado para este año y lo devengado hasta el 30 de junio.

El organismo dependiente de la 65 legislatura local indica en el documento que sólo en lo referente a la Inversión Pública, confirman la parálisis o el sub ejercicio que la OSFE estima en 58.94%. La inversión pública pasó de 1 mil 61 millones de pesos que se ejecutaron en todo 2021 a un presupuesto ya modificado de 3 mil 861 millones de pesos. De esta suma, destinada a infraestructura, obras, entre otros, en media año se ha ejercido mil 585 millones de pesos, quedando sin emplear 2 mil 275 millones de pesos, un importante remanente.

El Gobierno del Estado sin duda en números nos está indicando que ha bajado la cortina. A menos que busque echar mano de todos los recursos remanentes en los próximos tres meses, lo cual parece improbable y no da visos de ello dado que implicarían contrataciones, asignaciones de obra, licitaciones (para lo cual no habría tiempo) a diestra y siniestra y un escrupuloso, transparente y cuidadoso reporte de aplicación de recursos, su origen y destino, máxime que mucho de ello es dinero federal.

En general, de acuerdo al reporte de la OSFE, el gobierno de Murat dejó de usar una suma superior a los 12 mil 360 millones de pesos dado que contó con un presupuesto inicial de 45 mil 498 millones de pesos para los primeros seis meses de 2022, que se vieron ampliados a 54 mil 440 millones de pesos y, hasta el cierre del reporte de dos trimestres, junio de 2022, ha echado mano de 42 mil 79 millones de pesos.

Comparado con el ejercicio de 2021, en el primer semestre se gozó de un incremento nominal de poco más de 17 mil 700 millones de pesos, ya con el gasto modificado, o 48% de incremento global, sin embargo, se han dejado de usar esos 12 mil 360 mdp; se quedaron en la chequera poco más de 1 de cada 5 pesos aprobados como presupuesto ampliado para este año.

Total, ya se van, ¿así o más claro?

 

Embarazo infantil ¿qué se hace mal?

Se cumplieron tres años de la despenalización del aborto en Oaxaca y el grupo de edad que más pudo beneficiarse con esta reforma al Código penal no ha podido acceder a la Interrupción Legal del Embarazo, a pesar de los cientos de embarazos que aún se registran en niñas del estado.

Las cifras no mienten; el sector salud da cuenta de las más de 370 mujeres oaxaqueñas que han acudido a una de las tres instituciones para ser beneficiadas con la ILE, pero cuyas edades son a partir de los 15 años de edad. En contraste, el INEGI informa cada año que son cientos de niñas las que siguen con embarazos forzados y objeto de constantes violaciones, porque la gestación a esa edad suele ser consecuencia de un abuso sexual.

Aquí la pregunta sería porqué el estado sigue con los embarazos infantiles y la complacencia de las autoridades de impartición de justicia y la misma sociedad, que no protegen a las menores de edad a pesar del riesgo que representa un embarazo en cuerpos que apenas inician con su desarrollo.

A pesar de esta reforma, no hay suficientes nosocomios que puedan dar acceso al ILE a las mujeres de todo el territorio estatal, mucho menos a aquellas de comunidades rurales y que son las de mayores vejaciones a temprana edad.

Las autoridades deberían replantearse qué están haciendo mal y cuáles son las acciones que deberían emprender para no permitir que niñas de tan solo 10, 11 o 12 años lleven a cabo un embarazo, además de hacer efectiva la ley contra el violador, que suele ser mayor de edad, integrante del seno familiar o cercano a ésta.

 

El nuevo rico

De buena fuente: la compra de la casona de esquina de Armenta y López y Guerrero, en pleno centro de la capital, frente al templo de San Agustín por un reciente exdirector del IEEPO; operación que implicó un pago por poco más de 40 millones de pesos.

Nunca aclarada la renta de 30 equipos de cómputo en 2019 por parte del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca al precio que costaría la compra del equipo nuevo, alrededor de casi 7 mil pesos por cada unidad. En 2018 había rentado 130 computadoras a un precio superior a los siete mil 400 pesos.