Los dineros oscuros del Ayuntamiento
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Opinión

BARATARIA

Los dineros oscuros del Ayuntamiento

 


La crisis económica y financiera, que impacta en lo social, tiene nombres y apellidos en el Ayuntamiento capitalino y el domingo Francisco Martínez Neri se aventuró a señalar la papa caliente que tiene en las manos.

Los culpables del desastre lo son de todos los signos políticos, de todas las tendencias. Los problemas financieros se han ido acumulado al menos desde hace 14 años y datan de la administración del priista José Antonio Hernández Fraguas, que gobernó la capital de 2008 a 2010 y un segundo periodo de 2017 a 2018; el panista Luis Ugartechea Begué, presidente municipal del gabinismo, de  2010 a 2013; Javier Villacaña, 2013-2016 y el inefable Oswaldo García Jarquín, todos, de una u otra forma pusieron su “granito de arena” para que el ayuntamiento afronte una deuda estimada en 400 millones de pesos.

Ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT), se acumularon deudas por 111 millones de pesos de Javier Villacaña y Luis Ugartechea; el panista sumó deudas por 50 millones de pesos y ¡120 nuevas plazas! a la siguiente administración. En su momento, José Antonio Hernández Fraguas lanzó un misil de “fuego amigo” a Javier Villacaña a quien acusó de heredar 30 millones de pesos de compromisos bancarios y 19 millones del Fondo de Pensiones.

Recordemos amiga lectora-lector, que en su momento Fraguas señaló el costoso censo de ambulantes por el cual se pagó 5 millones de pesos y en nada sirvió para resolver el problema del comercio callejero, por el contrario, se detonó en esa época.

Fueron cuatro expresidentes que han dejado una bomba de tiempo, pero Oswaldo podría afrontar problemas jurídicos porque, como ha señalado Francisco Martínez Neri, destinó recursos de obras para el pago de nómina, y sacar dinero de una bolsa para gastarlo en otra está penadísimo por las leyes, entre ellas la Ley de Coordinación Fiscal.

Meticuloso Martínez Neri ha ido acumulando pruebas; la próxima sesión de cabildo será trascendental para saber qué acciones habrá que tomar. En el cabildo hay personajes de la pasada administración, regidores, que repitieron; sin embargo, uno de ellos tendrá que ofrecer más explicaciones que otros: Jorge Castro Campos, síndico segundo que hoy, como hasta diciembre pasado, tenía que ver con el manejo de los dineros municipales como síndico hacendario.

¿Sólo mala administración?

 

QUEJA

Las quejas todo el tiempo, a todas horas  en redes sociales al referirse a la ciudad de Oaxaca. “¡Sigue muy pesado el tráfico!” Cortesía de las muy bien planeadas obras que se realizan en la ciudad.

 

Ombusdperson, alejados del pueblo

El pasado domingo 19 de junio se cumplieron seis años del fallido desalojo del bloqueo levantado por habitantes de Nochixtlán y el magisterio en la Autopista Oaxaca -Puebla, y los daños colaterales siguen afectando a las y los oaxaqueños.

La conmemoración de estos lamentables hechos que cobraron la vida de inocentes e integrantes de organizaciones sociales, fuentes de apoyo al magisterio oaxaqueño, inició desde el pasado viernes 17 de diciembre.

Continuaron el sábado 18 de junio con la Caravana Motorizada en el que participaron organizaciones sociales, el Comité de Víctimas y representantes de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).

La Caravana partió desde el crucero de Nochixtlán, pasó por la caseta de Huitzo hasta llegar al crucero con el municipio de San Francisco Telixtlahuaca, pero a su paso los participantes, entre ellos del Frente Popular Revolucionario (FPR) y del Movimiento Unificador de la Lucha Triqui (MULT), realizaron bloqueos que afectaron a miles de automovilistas.

Sin duda los lamentables hechos ocurridos hace seis años no deben quedar impunes, sin embargo, las organizaciones sociales siguen con sus mismas prácticas para afectar el derecho al libre tránsito de las y los ciudadanos.

Lo que causó una gran indignación en esta Caravana Motorizada es que en los bloqueos que realizaron en su trayecto dejaron varadas a familias que viajaban con menores de edad, quienes por momentos quedaron en medio de consignas y cohetones que lanzaban los flamantes luchadores sociales.

En dicha Caravana también se integraron observadores de la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO), quienes lejos de velar por igual los derechos humanos y de libre tránsito de las y los ciudadanos, se dedicaron a proteger solamente a los manifestantes.

Familias afectadas señalaron que estos supuestos defensores colocaron una camioneta Ford Ranger color Rojo para impedir el paso de los automovilistas en las zonas donde los participantes de la Caravana realizaban sus mítines.

Es por ello, que los ciudadanos se preguntan a quién o quiénes sirve la Defensoría? ¿al pueblo o a las organizaciones sociales?

Recordemos que a nivel nacional se impulsó una iniciativa para desaparecer éstas defensorías que son verdaderos elefantes blancos, en algunos casos solo velan por los intereses de grupos políticos y organizaciones sociales.

En Estados como Oaxaca vale la pena revisar el actuar de estos organismos, ya que hace tiempo que está institución perdió su cercanía con el pueblo, pero cada año sangra al erario con millones de pesos que se le asigna sin cumplir con labores principal, proteger y velar por los derechos humanos de más y los oaxaqueños.

Una herencia y desafío a la ciudadanía es esa piedra, “homenaje a los caídos” en Nochixtlán que la Sección 22 sembró en el centro de la ciudad de manera retadora y desafiante. Esto ya llevó a la reacción del Instituto Nacional de Antropología e Historia que emplazó al municipio a retirarla dado que no está en sintonía con la herencia arquitectónica de la Verde Antequera.

Tiene el municipio una papa caliente para negociar y retirarla sin que cree escozor con el magisterio oaxaqueño. Otro reto a resolver para la maltrecha administración municipal.