HABLANDO de política nacional, de forma clara, la elección para gobernador o gobernadora del Estado de México, donde la precandidata del partido Morena, DELFINA GÓMEZ ÁLVAREZ, fue acusada de EXIGIR –cuando fue presidente municipal de Texcoco– un diezmo sobre la nómina que devengaban trabajadores de ese Ayuntamiento para aportarlo a su partido MORENA (para ser empleado con documentados fines político electorales).
EL PRESIDENTE de la junta de coordinación política en la cámara alta, RICARDO MONREAL, confirmó esta acción atribuida a GÓMEZ y remarcó que la acción “está documentada en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y el Instituto Nacional Electoral, quienes resolvieron, e impusieron a la susodicha, una amonestación”, no obstante, “no hay carpeta, ni denuncia penal”.
El TEPJF al resolver el expediente tuvo que dar vista al ministerio público por tratarse de un delito, tal como lo indica el artículo 222 del Código Nacional de Procedimientos Penales, que es el deber de denunciar, pero como en nuestro país la ley NO es ley, los mismos magistrados simulan o disfrazan su actuar jurisdiccional para no verse incluidos en controversias con el partido que está en el poder, que, a decir de sus militantes morenistas, es el partido oficial al más puro estilo del viejo PRI o PRIMOR. ¿Así o más claro?
SEPPUKU
A ESCALA federal transcienden comentarios provenientes del Sistema de Transporte Colectivo (STC) que refieren que por falta de conocimiento en la Administración Pública y empresarial, la corcholata favorita, CLAUDIA SHEINBAUM, se está haciendo el equivalente a un seppuku (internacionalmente conocido como harakiri) justificándose con torpes ocurrencias, argumentando “complotonterias” pues el Metro –desde su construcción con Diaz Ordaz y varias décadas en sus posteriores administraciones– jamás sufrió una política de “parches”, como en esta administración.
¿Acaso el STC (Metro) no llegó, otrora, a ocupar un honorable y honroso lugar en el mundo como el mejor sistema de transporte colectivo?
HOY OCUPA el primer lugar, pero en el “parchímetro”, no hay línea ni estación que no esté llena de parches, con piezas piratas o adaptadas o de MEDIO USO.
EL PRECIO de tanto “ahorro” para el gobierno de 4TA está comenzando a pagarse. A pesar de todo los pretextos, justificaciones y respaldos del mitómano de Macuspana a la actual jefe de gobierno de la Ciudad de México, la pérdida de posicionamiento electoral y de la imagen de SHEINBAUM, colapsará como el mismo sistema de transporte colectivo en comento.
CUENTAN que incluso, ante la decisión de evadir el mantenimiento del Metro, y “reducir” al mínimo sus costos, en este “negocio” se hizo a un lado el magnate CARLOS SLIM, para dar paso al empresario mexicano José María Riobóo, esposo de la cuestionada ministra “pirata” Yasmín Esquivel.
ASÍ Riobóo, el favorito del MITÓMANO de Macuspana, tuvo acceso al dinero y poder derivado de los contratos leoninos directos de construcción, sin concursos ni licitaciones en la aprobación.
Y COMO DE ALGÚN lado tenía que salir el recurso que a manos llenas dilapida y reparte el fallido presidente (que, por cierto, sale de no dar mantenimiento al Metro, de no comprar medicinas, de cancelar programas sociales, etcétera) finalmente, se le está “agusanando” la fruta. SLIM, sabe jugar en las grandes ligas como un gran beisbolero.
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