En México no existe la cultura del ahorro, lo que sí está muy arraigado son las fiestas a cada momento, la gente por lo general consigue préstamos para poder hacer una fiesta, así que esa es la primera lección que nos deja el Covid, debemos ahorrar y pensar a futuro para prevenir cualquier cosa y no gastar lo que no tenemos. Organizar nuestras prioridades puede determinar nuestro porvenir, el ser precavido siempre nos traerá como consecuencia no sufrir o aminorar las dificultades que nos presente la vida en un futuro.
También hemos visto en este periodo de pandemia el desarrollo de una cultura de higiene que para algunos podría ser excesivo, pero en realidad debería ser lo normal, es decir, limpiar, lavar y desinfectar espacios públicos se debe hacer frecuentemente, también el uso de gel antibacterial para ingresar a lugares públicos debería ser de uso diario. En diferentes mercados hemos visto que los locatarios han lavado las calles y los locales de esos espacios, en mis recuerdos no está el qué algún día limpiarán la central de abastos, esa es una actividad que se debiera hacer con cotidianeidad con o sin Covid.
El tercer aspecto que nos enseñó el Covid es que en situaciones de crisis nos enfrentamos a nosotros mismos, cada quien puede observarse y determinar si nos volvimos mezquinos o solidarios. Hay muchas historias detrás de esta pandemia, algunas que nos engrandecen como seres humanos y que han sacado lo mejor de nosotros mismos, mostrando nuestra mejor cara, gente apoyando gente o sacrificando un poco de lo que tiene para compartir con los demás y que además lo hacen con gusto, pero lamentablemente también están las historias totalmente opuestas, gente que incluso aprovecha la situación de crisis ante quienes ya son vulnerables.
Otra enseñanza del Covid es que nos dimos cuenta que debe haber más apoyos para el campo mexicano ya que lo que nunca debe faltar son alimentos. Si nuestro país fuera más productivo respeto a productos primarios no dependeríamos del tener que importar alimentos de otros países, el ejemplo más claro es el maíz y lo menciono ya que como es bien sabido es la base de la alimentación de los mexicanos y aun así no se apoya su producción.
También, nos dimos cuenta que apoyar al sector salud desde sus bases, es decir abrir matrícula para que más personas estudien las licenciaturas apegadas a este rubro y apoyar a personal que ya trabaja en el sector salud siempre será prioritario, o al menos ubicar en nuevos centros hospitalarios a los muchos trabajadores de la salud que no tienen empleo sería beneficios para toda la sociedad.
Otro aspecto que estamos aprendiendo es que el sistema tradicional educativo en México es obsoleto, que el sistema de educación constructivista que emplean en países de primer mundo es hacia donde debemos dirigirnos ya que el constructivismo hace que los estudiantes sean autodidactas y puedan desarrollarse académicamente por ellos mismos.
También, la tecnología, en específico el internet nos ha mostrado que la educación debe cambiar, que debemos estar preparados y adaptarnos para estudiar de otras formas.
Y para finalizar puedo decir que aprendimos que nos falta ingenio y desarrollar nuestras habilidades para resolver diferentes problemáticas con las que nos enfrentamos, resolver ser autosuficientes bajo cualquier circunstancia y adaptarnos a los cambios que se nos presenten para poder realizar las actividades que cotidianamente llevamos a cabo como el estudiar, el socializar y el ejercitarnos entre otras actividades.
En realidad, existen muchas enseñanzas que podemos tomar de estos tiempos, cada persona puede obtener sus conclusiones y aprender para crecer y pensar en un mejor porvenir ¿o usted qué opina?
