Cierre de la penitenciaría
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Opinión

Cierre de la penitenciaría

 


Uno de los actos administrativos más importantes del actual gobierno del maestro  Alejandro Ismael Murat Hinojosa es, sin lugar a dudas, el cierre de la penitenciaría de Ixcotel.

Este penal fue inaugurado durante la gestión de don Alfonso Pérez Gasga, precisamente durante el último año de su gobierno en 1962.

Recuerdo con claridad el acontecimiento porque estuve presente, acompañando a don Pedro Cancino Gordillo, a la sazón, delegado de la Secretaría de Hacienda en nuestra entidad federativa y tuve la oportunidad de felicitar a don Alfonso.

Permítame amigo lector, querida lectora, recordar otra inauguración de aquel año, me refiero a la Fuente de las Siete Regiones, en donde también estuve presente; el lugar en donde se instaló ese bello monumento en honor a nuestras regiones y desde luego a sus etnias originarias, fue a la entrada a la Ciudad de Oaxaca de Juárez, viniendo de la Ciudad de México. Actualmente, en el mismo lugar podemos ver un monumento sedente a la madre, ya que la fuente original fue desmontada durante el gobierno de don Rodolfo Brena Torres para instalarla en el norte de la ciudad, casi frente al Hospital Civil; posteriormente se le añadió otra estatua, y por eso hoy se le llama Fuente de las Ocho Regiones.

Bien, el penal de Ixcotel ya estaba saturado, los presos se hacinaban en celdas construidas para dos reclusos y las ocupaban en muchos casos seis reos, lo cual era ya insostenible por razones obvias, tanto en lo relativo a los derechos humanos, como a la sanidad misma.

También es de hacer notar, que al interior del penal, existía una suerte de auto gobierno de los presos que se constituyó en una grave lacra penitenciaria.

Recuerdo que un recluso a quien visité en ese penal hace ya muchos años, me comentó que en ese lugar “no se podía vivir sin el uso de alguna droga”; en aquellos años dominaba la mariguana y no se conocían las drogas sintéticas de la actualidad.

El traslado de los reclusos a Tanivet por el rumbo de Tlacolula y a los penales de Etla y Miahuatlán, es sin lugar a dudas un alivio para la administración, así como para los presos; además que seguramente se rehabilitó el penal de Tanivet, que por varios años permaneció abandonado.

En los medios locales y por voz del señor Gobernador Murat, hemos sido informados que la Secretaría de la Defensa Nacional es la propietaria del inmueble, y se está pensando en el destino que se dará al predio, ya cultural, ya administrativo y quizá, pienso, es un decir, que bien puede ser habilitado para cuartel de la Guardia Nacional.

Los únicos que van a sufrir un poco, son los abofados penalistas de la ciudad de Oaxaca de Juárez, ya que para alguna diligencia ahora tendrán que viajar fuera del Distrito del Centro.

 

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