Al iniciar un nuevo año, todo son buenos deseos para la familia, los amigos, los conocidos. “Que este año sea mejor que el anterior”; “que haya mucha dicha, trabajo, dinero, amor”, son los parabienes que están a flor de labio para soltarlo a nuestros seres queridos. Esos buenos deseos también se lo debemos externar a nuestro país, a nuestro estado, a nuestro municipio. ¿Sabe por qué? Pues porque este año tendremos elecciones y deseamos que todo se realice en completa calma, sin disturbios, sin tranzas; sin violencia. Eso sí: que gane el mejor.
En efecto. En cinco meses exactamente, el domingo 2 de junio de 2024, México llevará a cabo el proceso electoral más grande de su historia; millones de ciudadanos acudirán a las urnas para elegir 19 mil 746 cargos locales y 629 federales, incluido el máximo cargo de elección popular del país: la Presidencia de la República. Claro: ¡se va el Peje!
El 7 de septiembre de 2023, la consejera presidenta del Instituto Nacional Electoral (INE), Guadalupe Taddei, dio inicio al proceso electoral 2023-2024 y declaró que el organismo estaba listo para organizar “las más complejas elecciones federales de nuestra historia reciente”.
Así es…México celebrará elecciones federales y la concurrencia de las 32 entidades federativas.
En el ámbito federal estarán en juego 629 cargos: la Presidencia de la República y el Congreso federal, compuesto por 128 senadores y 500 diputados.
Por la Cámara de Senadores serán 64 senadurías por el principio de mayoría relativa, 32 por el principio de representación proporcional y 32 senadurías de primera minoría.
Mientras que en la Cámara alta son 300 diputaciones de mayoría relativa y 200 de representación proporcional.
Todas las entidades federativas tendrán elecciones locales, pero solo en nueve de ellas se renovará la gubernatura (Jefatura de Gobierno en el caso de la capital mexicana): Ciudad de México, Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco y Veracruz
Asimismo, en la mayoría de los estados se renovarán congresos locales (excepto en Coahuila, donde se renovó en 2023), presidencias municipales, sindicaturas y regidurías. En total, se elegirán 19 mil 746 cargos en las 32 entidades del país.
La entidad oaxaqueña renovará la LXVI Legislatura local: 25 diputados electos por mayoría relativa y 17 designados mediante representación proporcional, es decir, 42 diputados, además de 153 ayuntamientos. Luego entonces, ¿cómo no desearle suerte al país, al estado y a los municipios, pero también al órgano electoral responsable de estos comicios, si lo que se elegirá es algo monstruoso?
Porque en Oaxaca, los problemas para organizar los comicios empezaron desde el año pasado, desde que el Instituto Estatal Electoral y Participación Ciudadana de Oaxaca (IEEPCO) se encuentra bajo el ojo del huracán al ser auditado por un presunto desvío de 20 millones de pesos, caso que no ha sido cerrado y que mantiene una pugna interna de los funcionarios que integran este órgano.
Otro asunto que surgió la semana pasada es que, de los 153 Consejos Municipales Electorales contemplados para la organización de las elecciones del 2024, al menos 46 de estos, no cuentan con el número suficiente de integrantes, por lo cual, únicamente se han integrado 107 organismos, quienes garantizarán la celebración pacífica de las elecciones.
En teoría, los consejos deben instalarse para la preparación, desarrollo y vigilancia, con el fin de asegurar a los ciudadanos el ejercicio de los derechos político electorales, garantizar la celebración periódica y pacífica de las elecciones.
Sin embargo, existen municipios donde no es posible celebrar la integración de Consejos Municipales con el número de integrantes para garantizar su adecuado funcionamiento y el cumplimiento a las atribuciones y funciones a desempeñar.
Lo anterior, a pesar de que se determinó la disposición de este órgano electoral llevando una ampliación de plazos de registro a la primera convocatoria para la integración y designación de las personas a integrar los órganos desconcentrados.
El IEEPCO informó sobre la emisión de una Segunda Convocatoria, pero, “hubo municipios donde existieron escasos o nulos registros de participación, y por lo tanto no es posible realizar una integración suficiente”.
Son 46 municipios donde no es posible la integración de Consejos Municipales Electorales y por tanto su instalación, de conformidad con establecido en el artículo 53, numeral 3 de la LIPEEO, ni considerando el mínimo de seis personas.
¿Qué está pasando? ¿La ciudadanía ya no cree en los comicios por eso no quieren participar en la integración de los Consejos Municipales Electorales? Definitivamente, ¿ya no hay credibilidad en los comicios? ¿Y para qué sirve todo el dinero que se destina para cada elección?
De la competencia desleal ya ni se diga, porque ya hay precampañas adelantadas. Se ve en los espectaculares instalados en diversos puntos de la ciudad y en los autobuses urbanos que llevan publicidad de los aspirantes, de los diversos partidos, pero más de Morena.
Hace unos días, vecinos de una colonia, la Loma Linda, bloquearon a la altura del Monumento a la Madre en protesta por la falta de agua potable. La segunda tarde del bloqueo, hizo su aparición una camioneta blanca que obsequió a los inconformes, despensas con publicidad de Claudia Sheinbaum. ¿De qué se trata? ¿Los premiaron por bloquear la calle?
Por otra parte, el jaloneo ya comenzó en algunos aspirantes al filtrarse audios con diálogos comprometedores, que al siguiente día son desmentidos, como si la ciudadanía no supiera de qué están hecho los políticos, que un día son parte de un partido y al otro, saltan sin dignidad alguna.
En verdad que deseamos la mejor suerte a nuestro país, a nuestro estado y a los municipios que enfrentarán este proceso. Pero también suerte a la ciudadanía que tendrá que soportar los miles de spots en medios impresos, digitales y radiales, así como las mentiras de los que suplicarán el voto, aunque después nunca más los veamos.
