Con el incremento del salario mínimo en 20 por ciento, un oaxaqueño tendría que trabajar un mes para ganar tres mil 748 pesos, lo que significa que apenas ganaría la mitad de la canasta básica para alimentar a una familia de cuatro personas, que de acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) es de seis mil 304.24 pesos.
Y es que el lunes se anunció el incremento del salario mínimo de 102.68 a 123.22 pesos diarios, mientras que el Coneval señala que el costo diario de la Canasta Alimentaria Urbana en noviembre del 2019 correspondió a 52.54 pesos, mientras que en el ámbito rural es de 37.26 pesos.
La Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) señala que el salario promedio de los trabajadores oaxaqueños es de 4 mil 400 mensuales, aproximadamente 146 pesos diarios, poco más del salario mínimo ahora vigente.
Pero la situación se agrava si se toma el costo mensual de la canasta no alimentaria, que en zonas urbanas es de mil 576 pesos, por los mil 117 de zonas rurales. Sumados la canasta alimentaria y la no alimentaria, en áreas urbanas una sola persona necesita tres mil 150 pesos y en áreas rurales de dos mil 36 pesos.
Si tomamos en cuenta los tres mil pesos que se necesitan por persona en Oaxaca, y lo pasamos a una familia de cuatro integrantes en donde sólo labora una persona, se necesitarían 12 mil pesos al mes para que la familia viviera dignamente.
La Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) publicada en julio del 2019, revela que el ingreso de una familia oaxaqueña cada mes es de 10 mil 532 pesos, mil 500 pesos menos de lo que necesitaría para vivir dignamente.
Oaxaca es la tercera entidad con los peores ingresos familiares, sólo después de Chiapas y Guerrero, en contraste, en la Ciudad de México, el ingreso mensual de una familia asciende a 25 mil 361, más del doble de lo que necesitan para vivir dignamente.
