A un año de la entrada en vigor de la llamada “Ley Antichatarra” se tienen más impactos negativos que avances en la salud de los infantes, coincidieron comerciantes en pequeño.
Y es que el 5 de agosto de 2020, el Congreso local aprobó con 31 votos a favor, la adición del artículo 20 bis a la Ley de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes del Estado de Oaxaca, que prohíbe la distribución, venta, regalo y suministro a menores de edad, de bebidas azucaradas y alimentos envasados de alto contenido calórico.
La reforma entró en vigor el 5 de septiembre, luego de publicarse en el Periódico Oficial del Estado, no obstante los tenderos de la capital y zona metropolitana mantienen la comercialización de tales productos a menores de edad.
Salvador López presidente de la Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (Canacope) lamenta que la norma siga sin leyes secundarias y se desconozca quién aplicará las sanciones o la regulación.
A su vez, organizaciones impulsoras de la campaña “Por el derecho a una alimentación sana y nutritiva en el estado de Oaxaca” exhortaron al secretario de Salud, Juan Carlos Márquez Heine, a cumplir con la ley.
Señalaron que a un año de la aprobación de la llamada Ley Antichatarra, los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) han incumplido con la aplicación y sanciones para aquellos negocios que expenden alimentos con exceso de calorías a menores de edad.
Según el dictamen, la reforma busca proteger la salud y la vida de niñas y niños, alejándolos del consumo de bebidas azucaradas y alimentos envasados de alto contenido calórico.
A un año de distancia de la aprobación de la reforma al artículo 20 Bis de la Ley de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes del Estado de Oaxaca, no se ha informado sobre inspecciones a cadenas comerciales, pequeños negocios y sanciones o multas.
También a decir de las organizaciones es obligación de la Secretaría de Salud de Oaxaca crear la normatividad reglamentaria para poder cumplir cabalmente con la prohibición.
Mientras que en materia económica, el representante de los comerciantes advierte pérdidas en el sector de las tiendas de abarrotes y misceláneas, dado que dichos productos tienen alta demanda.
En tanto, en varias tiendas pequeñas ubicadas en la capital y zona conurbada, pese a tener letreros sobre la medida, los encargados despachan dulces y refrescos a menores de edad, sin mayores complicaciones o advertencias.
