Luego de que en el Senado de la República se aprobara la iniciativa de reforma a la Ley General de Salud, que establece como obligatoria la prueba de tamiz cardiológico a recién nacidos, en Oaxaca el Congreso local la mantiene en la congeladora.
Apenas en marzo de este año, el Senado de la República aprobó la aplicación del tamiz cardiológico en todas las instancias de salud pública y privada del país, pero en la entidad no se ha tenido el respaldo, a pesar de contar con una iniciativa para Oaxaca antes de la aprobación en la capital del país.
En ese mismo mes, el secretario de Salud de Oaxaca, Donato Escamilla Casas, había señalado la importancia de aprobar esta iniciativa de ley para la detección oportuna de cardiopatías simples y complejas en recién nacidos, para una atención inmediata.
La iniciativa para Oaxaca mostró la necesidad de una detección a tiempo de cardiopatías en recién nacidos, como una obligación de las autoridades en garantizar los derechos de los niños y las niñas.
El tamiz cardiológico es un estudio que debe realizarse entre las primeras 24 y 72 horas de vida del recién nacido, mediante una prueba de oximetría de pulso para detectar la disminución o diferencias en la saturación de oxígeno.
El primer estado en incorporar esta medida en la Ley de salud fue Sonora, donde se han salvado muchas vidas con la detección oportuna a partir de 2018. La iniciativa fue presentada por legisladoras con apoyo de la cardióloga pediatra y oaxaqueña, Erika Flor Sosa, quien también ha visitado el estado para capacitar a médicos en el manejo de sensores para la aplicación del tamiz.
Así también, unió esfuerzos con la diputada local Victoria Cruz Villar, quien presentó la iniciativa para Oaxaca, pero a la fecha no ha sido valorada ni avalada por el resto de diputados y diputadas.
“Esta iniciativa pretende prevenir situaciones de riesgo en la salud de los menores, ya que la detección oportuna brinda el tiempo que se necesita para el tratamiento y cirugía del bebé, además de disminuir o limitar el daño que pudiera causar el defecto cardíaco en el cuerpo del niño, tanto a nivel cerebral como en cualquier otro órgano”, se explica en la iniciativa.
