Con la llegada del crucero Coral Princess durante este fin de semana a Bahías de Huatulco, suman 25 navíos que arriban a este destino, los cuales han generado una derrama económica de 52 millones 24 mil pesos durante este 2024.
Sobre esta industria de cruceros pende la amenaza de incremento de impuestos. Apenas el 9 de diciembre el Gobierno mexicano decidió posponer hasta el 1 de julio de 2025 la implementación del impuesto de 42 dólares (unos 39,8 euros) a cada pasajero de cruceros que arribe a puertos nacionales, originalmente previsto para entrar en vigor el próximo 1 de enero, según anunció el lunes el sector.
En el caso del arribo a Oaxaca, las embarcaciones transportaron a 46 mil 201 personas pasajeras y 19 mil 849 tripulantes. Se prevé que al cierre del año lleguen un total de 26 cruceros a las playas de Santa María Huatulco, posicionándose como uno de los destinos de atracción mundial.
El gobierno del estado destacó que, a través de reuniones con la Unión de Secretarios de Turismo de México (Asetur México), se evalúan las estrategias para incrementar el arribo de embarcaciones y mejorar la experiencia de visitantes nacionales e internacionales.
El incremento impositivo fue censurado por la Asociación de Cruceros de Florida y el Caribe (FCCA, por sus siglas en inglés) que, aunque apreció el aplazamiento, insistió en su preocupación por el impacto negativo que este derecho podría tener en la industria turística y en las comunidades costeras del país.
Al respecto, en Oaxaca se destacó que se han sostenido encuentros con representantes de navieras para valorar las necesidades planteadas por las empresas, con el objetivo de mejorar la infraestructura y los servicios para potenciar los atractivos de Bahías de Huatulco como destino turístico para este segmento.
En algo que podría afectar a Huatulco por incremento impositivo, la Asociación Mexicana de Cruceros (Amepact) advirtió sobre el impacto en los empleos locales, afectando a sectores como taxistas, guías turísticos, artesanos y pequeños empresarios.
“La reducción en los ingresos derivará en la pérdida de empleos y en una menor recaudación fiscal para el Gobierno. México perderá competitividad, convirtiéndose en uno de los destinos de cruceros más caros del mundo”, concluyó.