Una inversión segura y práctica tanto para hogares como negocios es la instalación de un calentador o boiler eléctrico de paso. Gracias a estos aparatos, se ahorra tanto agua como combustible, no importa si son a base de gas o electricidad. Podrás disfrutar de varias actividades como un baño, lavar trastes, ropa o la casa, sin tener que sufrir por el agua fría. Pero para que estos electrodomésticos te duren más tiempo, tienes que seguir nuestros consejos sobre el uso y mantenimiento de los calentadores de agua.
Un buen uso del calentador de paso
Para que el boiler tenga un buen funcionamiento y una vida útil más larga, es necesario darle un buen uso. Además, tienes que considerar cada cuanto tiempo deberás hacerle mantenimiento preventivo y cuándo es necesario solicitar un servicio de reparación. No se debe prestar atención solo cuando hay una falla, ya que a veces esto no es visible y puede estar ocasionando un daño mayor a largo plazo.
Si tu calentador tiene mucho tiempo sin recibir un mantenimiento, o peor aún, jamás se lo has hecho, es posible que tengas que reparar y cambiar algunas piezas. En algunos casos, es lamentable como se daña para siempre estos aparatos por no haber cumplido con un mantenimiento frecuente.
Uno de los indicativos de que algo malo está ocurriendo es que ha aumentado el consumo de la energía. Antes de que ocurran descomposturas más graves, puedes pedir información sobre una revisión a la tienda de electrodomésticos de Avera.
Consejos para un buen funcionamiento del calentador de agua
Para evitar averías, sino más bien que el calentador funcione correctamente, debes considerar algunas recomendaciones que te damos a continuación. De un buen uso depende la calidad del agua que disfrutaremos. Recuerda también hacer el mantenimiento preventivo una o dos veces al año.
Instalación
El primer consejo está relacionado con la instalación del calentador. Para esto, el experto de evaluar la distancia que hay entre la salida de agua y el calentador, misma que debe ser la que indica el modelo de calentador que se ha comprado. Gracias a esto, se garantiza una buena presión de agua. De esta manera se aprovecha mejor la energía que consume el calentador.
Vale mencionar que cada calentador tiene diferentes capacidades, y es esta la que determina la cantidad de servicio que abastecerá el agua caliente. Cada servicio es lo que se necesita para un baño completo. Y de acuerdo a la capacidad de servicios, se nivelará la presión de agua. Pero, entre más distancia haya entre la salida y el calentador, menor será la capacidad de servicios.
Entonces, para disfrutar de los servicios suficientes de acuerdo a la demanda del hogar, se debe considerar los siguiente: para un servicio, la distancia debe ser menor a tres metros, para servicio y medio, menos de ocho metros; y para dos servicios, la distancia debe ser menor a doce metros. Claro, las recomendaciones pueden variar de acuerdo al modelo del boiler.
Carga de la batería
Para un buen funcionamiento del calentador de agua, es necesario revisar la carga de batería, de forma periódica. Este aspecto es olvidado con frecuencia pues no todas personas saben que estos aparatos funcionan con batería que permite hacer el encendido del piloto.
La batería es la que ayuda a ahorrar la cantidad de gas que se usará para hacer el calentamiento. Por eso, debe tener un buen mantenimiento, de lo contrario, se corre el riesgo de provocar un accidente.
Proteger el calentador
La instalación del calentador también supone proteger este de la exposición de elementos como la lluvia o el sol. Aunque los boilers se diseñan para usar a la intemperie, si estos no están tan expuestos a factores climáticos, sus materiales se desgastarán menos y, en consecuencia, tendrá una vida útil más larga.
En general, revisar la instalación y lo que protege el calentador por lo menos cada seis meses, te ayudará a evitar averías en tu calentador.
No usar regaderas ahorradoras
Se tiene el mal concepto que estas son útiles para ahorrar tanto energía como agua. Sin embargo, esta puede ser una mala inversión pues reducen la presión de agua, y esto puede afectar el funcionamiento del calentador. Más bien, pudieras ahorrar agua al reducir el tiempo de tu baño.
Por ejemplo, tienes que revisar que no haya fugas tanto de gas como de agua. Ambas fugas pueden ser peligrosas para quienes viven en casa y, por supuesto, para el inmueble.