Celebran XXV años de ordenación episcopal de Chávez Botello
El Arzobispo Emérito Monseñor, José Luis Chávez Botello agradeció a todos los presentes su caridad
La Arquidiócesis de Antequera Oaxaca, celebró este viernes una misa de Acción de Gracias por el XXV Aniversario de Ordenación Episcopal del Arzobispo Emérito Monseñor, José Luis Chávez Botello.
Desde la Basílica menor de nuestra Señora de la Soledad en la ciudad de Oaxaca, se dieron cita sacerdotes, fieles católicos y el Arzobispo Pedro Vázquez Villalobos para celebrar al Arzobispo Emérito sus Bodas de Plata Episcopales.
A nombre de la Arquidiócesis de Antequera Oaxaca, agradecerle a Dios porque un día lo llamó a las aguas bautismales, lo llamó a ser su ministro y participar en ese sacerdocio, hace unos años usted tenía estas tierras para agradecer a Dios sus 50 años como sacerdote, hoy tenemos esa gracia para unirnos a usted para decirle a Dios, gracias por 25 años de ser un sucesor de los apóstoles”, destacó el Arzobispo Pedro Vázquez Villalobos.
Recordó que durante seis años fue párroco de la tierra de Chávez Botello, “fui el párroco de su tierra natal y un año después, en 1997 usted fue ordenado Obispo, quiero agradecerle porque durante cinco años que viví en Puerto Escondido y usted me ayudó a iniciarme en este ministerio de iniciar como Obispo en esta tierra de Oaxaca”.
Un día me dijo el Papa Francisco que viniera suplirlo, me llena de alegría poderle decir gracias porque más de la mitad de su ministerio episcopal usted se entregó generosamente a la Arquidiócesis de Antequera Oaxaca, desde 2004 está en estas tierras de Oaxaca, toda esa ilusión y esperanza se ha ido haciendo realidad en nuestras comunidades, nos dejó un plan diocesano pastoral, plan que nos ha seguido ayudando e iluminado para trabajar en comunión y de una forma ordenada”, afirmó el Arzobispo.
En ese sentido, el Arzobispo Emérito Monseñor, José Luis Chávez Botello agradeció a todos los presentes su caridad “para unirse conmigo en esta acción de gracias, uno siente necesidad de agradecer a Dios con otras personas, gracias a todos los sacerdotes, a los jesuitas de las comunidades religiosas, fieles y amigos”, señaló.
