Virgen de la Soledad: 400 años con la Patrona
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Virgen de la Soledad: 400 años con la Patrona

El 18 de enero de 1960, bajo el pontificado de Juan XXIII, el Santuario sube a rango de Basílica


Virgen de la Soledad: 400 años con la Patrona | El Imparcial de Oaxaca

Historiadores y escritores oaxaqueños coinciden que la imagen de la Virgen de la Soledad, considerada como la Patrona de las y los oaxaqueños, está inmersa en una amplia leyenda religiosa.

En un texto dedicado a la Virgen que lleva como Título “Aroma de Leyenda”, el escritor oaxaqueño Guillermo Villa Castañeda, mejor conocido como José María Bradomín, destaca que tiene sus inicios, cierto día del mes de diciembre, para ser más exactos el 18, rindió la jornada en la ciudad una recua que conducía diversas mercaderías, procedente de la Villa Rica de la Veracruz con destino a la lejana ciudad de Guatemala.

Aunque el texto señala diversos años de este gran acontecimiento, la Iglesia Católica celebró este 2021 los 400 años de la llegada de la imagen de la Virgen de la Soledad, por lo cual se llevó a cabo el cierre del Año Jubilar.

En la historia del arriero, destaca que al pretender levantar su mula le fue imposible continuar su camino, por lo que para evitar problemas dio aviso a las autoridades. Al abrir la carga las autoridades descubrieron la imagen de la Virgen de la Soledad al pie de la Cruz y otra del Cristo de la Ascensión del Señor. 

Enseguida dieron aviso a los representantes de la iglesia que en aquellos años eran encabezados por el obispo Fray Bartolomé de Bohórquez, quien ordenó que la imagen de la Virgen fuera resguardada en la ermita y la imagen del Cristo enviada hacia donde hoy se ubica el templo de la Virgen del Carmen Alto.

En su momento, el cronista e historiador Miguel Ángel Chávez Romero, explicó que para venerar a la imagen, las autoridades religiosas iniciaron con la construcción del primer templo en 1582 y fue consagrado en 1690 por el obispo Sariñana y Cuenca. Años después se edificó el Convento de la Soledad que fue ocupada por monjas capuchinas de Santa Mónica.

Los feligreses que llegaron al templo no dudaron que los milagros recibidos provenían por su veneración a la Virgen, por lo que el 18 de enero de 1904, bajo el mando del arzobispo Eulogio Gillow, fue coronada pontíficamente, mientras que el 18 de enero de 1960 bajo el pontificado de Juan XXIII, el Santuario sube a rango de Basílica.

En este mismo periodo inició la remodelación del templo teniendo como su elemento más importante la portada, cuyo vigor la asemejan a un gigantesco contrafuerte con relieves escultóricas de mayor mérito en toda la ciudad.

En ello, José María Bradomín coincide que entre las más notables reliquias arquitectónicas que dejó como legado espiritual de la época del coloniaje, figura el antiguamente santuario y hoy basílica menor de la Soledad, erigida el 18 de diciembre de 1960.  

“Nada mejor para sintetizar en pocas palabras la magnificencia de la soberbia fábrica que el concepto, que en conjunto merece el Sr. Pbro. Gay: “Los arcos atrevidos, las bóvedas soberbias, la finura de los detalles, así como la grandiosidad y elevación del pensamiento que se manifiestan en el conjunto, hacen de este templo uno de los mejores de Oaxaca”.  

“Las esculturas de los diversos santos y padres de la Iglesia que asoman en las hornacinas y entre los cuales, de izquierda a derecha y en el primer cuerpo, destacan San Agustín, San Pedro, San Pablo y Santa Rosa de Lima; en el segundo cuerpo y al centro llama la atención un gran cuadro con un marco finamente moldurado, representación del monte Calvario, en el que aparece la Virgen al pie de la Cruz y al fondo la ciudad de Jerusalén, teniendo un ángel, a izquierda y derecha”.

Añade que fuera del cuadro, apareciendo en las urnas de este mismo cuerpo las esculturas de San Juan Evangelista, San Joaquín, Santa Ana, y Santa Cecilia; en el tercer cuerpo un gran ventanal octagonal permite el paso de la luz al coro y a izquierda y derecha del mismo la escultura de un obispo con un niño, San Sebastián, la Virgen de la Anunciación, el Arcángel San Gabriel, Santa Isabel de Hungría y un santo sin cabeza que suponemos sea San Juan Bautista.

“Finalmente, en el remate del porche y en la parte central se halla Nuestra Señora de la Ascensión, de mayor tamaño, descansando sobre un cúmulo de nubes y pequeñas cabezas de ángeles, y a ambos lados, encuadrados, las imágenes de un obispo y un religioso que sostiene un libro. El pórtico lateral exhibe únicamente tres esculturas, la de Carlos II, “El Hechizado”, la de San Antonio de Padua y la de San José con el Niño”.

En ese sentido, el escritor y el historiador que dedicaron parte de sus obras a la historia de la Virgen de la Soledad, destacan que desde su llegada, los habitantes de la Verde Antequera la adoptaron como la Reina y la Patrona de Oaxaca, a quien le brindaron toda una vida de culto y devoción que cada 18 de diciembre se demuestra cuando miles de feligreses acuden a la Basílica para agradecer por los milagros concedidos.

 

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