Miembros de la asociación de bares y cantinas de la ciudad, explotaron en contra del presidente municipal de Salina Cruz, al pretenderlos obligar pagar una cuota semanal para que permitan el acceso a sus clientes a puertas cerradas y darles el servicio.
Los denunciantes que prefirieron mantenerse en el anonimato por temor a las represalias, denunciaron que acordaron una cita el pasado fin de semana a fin de poder buscar alternativas de solución y hacer frente el Covid-19, que ha mermado sus ganancias en los últimos meses.
Los socios de este organismo en el municipio, esperaban acordar una reunión con la primera autoridad municipal para que les permitiera con todas las medidas estrictas de los Servicios de Salud de Oaxaca, abrir sus locales de venta de cerveza.
Sin embargo, grande fue la sorpresa de todos cuando a la reunión se presentó un funcionario muy cercano al alcalde Juan Carlos Atecas Altamirano, quien tras interrumpir la reunión, les propuso que pagaran 500 pesos semanales por negocio.
La idea del edil porteño es que todos los antros, bares y cantinas permitan el acceso a sus clientes pero a puerta cerrada y “sin que nadie se dé cuenta”, laboren con normalidad, pero a cambio, les pidió 500 pesos por local en el puerto.
La inconformidad de los prestadores de servicios no tuvo límite debido a que pagan todos sus impuestos, incluyendo a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y todavía tengan que dar “moches” al presidente por permitirles trabajar sin que nadie los moleste.
Dijeron los denunciantes que mientras antros y cantinas clandestinas abren de lunes a domingo, las autoridades municipales no las molestan y ni siquiera pagan impuestos, por lo cual.