Después de un mes de intensos enfrentamientos entre dos facciones del Cártel de Sinaloa, Los Chapitos y La Mayiza, se ha reportado una sorprendente alianza entre los hijos de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Según el portal Illicit Investigations, esta unión tiene como objetivo poner fin a la disputa territorial que ha desatado una ola de violencia en Sinaloa.
UN CONFLICTO DE TERRITORIO
Los enfrentamientos entre Los Chapitos, liderados por Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán, y La Mayiza, bajo el mando de Ismael Zambada Sicairos, conocido como “El Mayito Flaco”, han resultado en un aumento significativo de la violencia en la región. La disputa por el control de territorios clave ha dejado un saldo alarmante de ejecuciones y actos de violencia en ciudades como Culiacán.
LA REUNIÓN DECISIVA
La semana pasada, se reveló que Audías Flores Silva, alias “El Jardinero”, mano derecha del líder del CJNG, Nemesio Oseguera Cervantes, conocido como “El Mencho”, envió a uno de sus hombres de confianza, apodado “El H8”, para mantener una reunión crucial con un amigo cercano de Iván Archivaldo. Este encuentro, llevado a cabo en un rancho de Pachecos, Nayarit, tenía como finalidad formalizar una colaboración entre las dos facciones criminales.
UNA ESTRATEGIA DE COLABORACIÓN
Los acuerdos alcanzados entre los hombres de confianza de ambos cárteles incluyen la provisión de sicarios, dinero, armas, contactos y territorio para combatir a La Mayiza. El CJNG se concentrará en desplazar a los Zambada de estados estratégicos como Zacatecas, Nayarit y Chiapas, mientras que Los Chapitos buscarán consolidar su control en Sinaloa, Durango, Sonora y Chihuahua.
La creciente colaboración se ha manifestado a través de “narcomantas” colocadas por el CJNG, en las que se advierte sobre una “limpieza” de los rivales. En estos mensajes, se amenazan directamente a “El Mayito Flaco” y sus aliados, lo que evidencia la gravedad de la situación y la determinación de los cárteles involucrados.
UN PASADO CONTROVERSIAL
Este nuevo pacto no es la primera vez que Los Chapitos y el CJNG cruzan caminos. En 2016, los hijos de “El Chapo” fueron secuestrados en un restaurante en Puerto Vallarta, un evento que se dice estuvo mediado por Ismael Zambada, sugiriendo una compleja red de relaciones y rivalidades en el mundo del narcotráfico.
La alianza entre Los Chapitos y el CJNG representa un giro significativo en la dinámica del crimen organizado en México, donde los enemigos de antaño se unen ante un adversario común. A medida que esta colaboración se fortalece, la preocupación por el aumento de la violencia en Sinaloa y otras regiones del país se intensifica, lo que plantea un desafío considerable para las autoridades y la sociedad en general. La lucha por el control del narcotráfico en México continúa, y las repercusiones de esta nueva alianza se sentirán en los próximos meses.
