Una nueva ola de ciberataques ha sacudido a México, con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y el Portal del Empleo del Gobierno como las últimas víctimas de esta amenaza digital. La empresa de ciberseguridad Silikn ha revelado que los ataques provienen de cibercriminales con origen en Rusia, China, Estados Unidos y Corea del Norte.
EL CIBER ATAQUE
Según Víctor Ruiz, fundador de Silikn, un grupo de cibercriminales ha logrado acceder al Portal del Empleo del Gobierno de México (www.empleo.gob.mx), exponiendo los datos personales de aproximadamente 12 millones de usuarios. Este hackeo representa una grave violación a la privacidad y seguridad de datos sensibles de los ciudadanos mexicanos.
Sin embargo, el panorama se torna aún más preocupante con el ataque a la Sedena. Se ha detectado la venta de un subdominio (WebShell Access) que permite a los hackers ingresar a uno de los servidores de la dependencia militar. Esta situación plantea un riesgo inminente, considerando que la información almacenada en la Sedena es crítica y confidencial, pudiendo poner en peligro la seguridad nacional si cae en manos equivocadas.
Ruiz destaca que estos incidentes podrían ser resultado de un descuido en los protocolos de seguridad, evidenciando una falta de inversión suficiente en ciberseguridad y capacitación del personal en al menos 40 dependencias federales. La falta de aplicación adecuada de parches de seguridad y la ausencia de medidas preventivas han dejado al gobierno vulnerable a ataques de ransomware y otras formas de ciberdelincuencia.
EXPOSICIÓN DE DATOS SENSIBLES
El hackeo al Portal del Empleo expone datos sensibles como Afore, RFC, número de Seguridad Social, pasaporte y detalles de familiares, lo que podría tener graves repercusiones para los afectados. Ruiz advierte sobre la urgente necesidad de asignar más recursos para proteger la información de los ciudadanos mexicanos y fortalecer las defensas cibernéticas del país.
Ante esta situación, se requiere una acción inmediata por parte de las autoridades para investigar y remediar estos ataques, así como implementar medidas efectivas de ciberseguridad que salvaguarden la información y la privacidad de los ciudadanos.
