Enero, mes sangriento para los periodistas

Roberto Toledo, colaborador del medio Monitor Michoacán, fue asesinado ayer en Zitácuaro. Es el cuarto periodista asesinado en un enero negro para el periodismo en México, la lista incluye a José Luis Gamboa, quien era director de un portal en Veracruz,

Además del fotógrafo freelance Margarito Martínez y la periodista Lourdes Maldonado López en la ciudad de Tijuana. La serie de asesinatos produjo manifestaciones en varios estados de la república la semana pasada.

Tirado había hecho público el viernes pasado, a través de la página de Monitor Michoacán en Facebook, que después de publicar información sobre el gobierno municipal relacionado con un deficiente manejo de la pandemia, así como de la presunta siembra de evidencias a personas detenidas, en redes sociales lo relacionaron a él con un presunto cártel de la droga.

Dijo que a través de un perfil de Facebook publicaron una foto suya que bajaron de su Whatsapp donde él aparecía con una jovencita a quien falsamente señalaron estaba vinculada con una organización criminal.

El portal había publicado otros trabajos relacionados con otros políticos, como el exfiscal regional de Zitácuaro, Francisco Herrera Franco, hoy fiscal regional de Apatzingán, publicó Revolución 3.0.

Este medio también dio a conocer que de acuerdo con Linares, las amenazas también habían sido contra el abogado Joel Vera, quien colabora con ellos

Pero no se habían dirigido contra Roberto Toledo, quien precisamente había mantenido un perfil bajo debido a las amenazas.

El director de Monitor Michoacán informó durante la transmisión en vivo que confirmó lamuerte de Roberto Toledo, que no dejarían de exhibir las corrupciones de gobiernos, funcionarios y políticos, lo cual dijo había llevado a la muerte de su compañero.

“Decirle a la familia del compañero que no vamos a dejar las cosas así, lo vamos a llevar a las últimas consecuencias”.

“Se cumplen las amenazas, y un compañero perdió la vida, tres personas llegaron dispararon de manera ruin y cobarde, nosotros no estamos armados, no traemos armas, nuestra única defensa es una pluma, una libreta”.

“Lamento que se trate de coartar la libertad de expresión, información veraz y oportuna, ya había señalado a varias personas y políticos, sigo señalándolos”, expresó.

La Fiscalía General de Michoacán dijo a la AP que estaban recabando la información sobre
el homicidio de Toledo en Zitácuaro.