El Centro de Salud y de Servicios Ampliados (CESSA) de San Jacinto Amilpas dejó de atender de cuatro a seis partos diarios a partir del 20 de marzo, como consecuencia de la falta de insumos para prestar el servicio.
Por medio de una circular, la encargada del CESSA de este municipio, María de los Ángeles Camiro Martínez, anunció la suspensión de servicios de parto hasta nuevo aviso al personal médico del nosocomio.
Lo anterior, dijo, “derivado de la situación que está pasando en la Unidad en relación a los residuos que han llegado a la capacidad total del congelador, así como a la escasez de oxígeno”.
Personal del CESSA incorporado al OPD IMSS Bienestar, denunciaron falta de respuestas de las autoridades de la Coordinación estatal encabezada por Soledad Zárate, pese a la exposición de falta de insumos desde febrero.
En diferentes comunicados al personal, la encargada del CESSA informa también del faltante de hojas blancas tamaño carta y de toners, que impiden la emisión de certificados médicos hasta nuevo aviso.
En febrero de este año, también se informó que, desde la suspensión de cuotas de recuperación de los pacientes, luego de que el Gobierno federal y estatal aseguraran la gratuidad de los servicios, la unidad médica no cuenta con recurso ni suministro para las necesidades propias del CESSA.
Desde el 5 de febrero, las autoridades del Centro de Salud expusieron que la empresa que suministraba oxígeno ya no renovó contrato y por tal motivo dejó de surtir los tanques correspondientes.
Ante esta situación, embarazadas que acuden a este CESSA de San Jacinto Amilpas son canalizadas a otras unidades médicas como el Hospital General “Dr. Aurelio Valdivieso”, a fin de no poner en riesgo la salud de ellas y sus bebés.
De esta crisis en el CESSA, la Coordinación Estatal no garantizó hasta ayer una solución inmediata a las necesidades de la unidad médica, que mostró deficiencias desde su traspaso al IMSS Bienestar.