Para Marisol Rojas Cruz, mujer originaria de Santa María Yosoyúa, quien vende flores de calabaza en el mercado de esta ciudad dijo desconocer de esta fecha y menos que pueda haber un reconocimiento a su labor diaria al frente de la casa y los hijos.
Cabe resaltar que el 5 de septiembre se conmemora el Día Internacional de la Mujer Indígena. La fecha fue elegida durante el Segundo Encuentro de Organizaciones y Movimientos de América que se reunió en 1983 en Tihuanacu (Bolivia), y desde entonces, cada año se conmemora el rol, esfuerzos y resistencias de mujeres de distintas zonas por la sobrevivencia de sus pueblos, y no ser avasallados por el progreso económico y tecnológico en deterioro de sus creencias.
Araceli Juárez, investigadora de la lengua materna en San Juan Mixtepec, habló de esta fecha, la cual sigue siendo letra muerta ante un mar de injusticias y vejaciones que vive la mujer indígena en casi todo el estado, en especial en la región Mixteca.
Agregó que no se puede hablar de una conmoción cuando no hay equidad y empoderamiento a la mujer “lo vemos desde los programas federales y estatales, donde sólo un par de ellos son para mujer, las reglas de operación para créditos, apoyos al campo, empleo temporal y demás sólo son para hombres”.
Desde ese argumento, la investigadora lamentó que no exista interés en reconocer a las mujeres indígenas cuando parte de la vida de la región la resuelven ellas.
Aseveró que la mujer indígena de la Mixteca carga en sus hombros, las responsabilidades de la casa, que es mucho, dijo, las tierras, los hijos, los abuelos y aún así la salud, economía y la educación de las nuevas generaciones.
“Muchos funcionarios hoy sólo ven la indumentaria y por ello la mujer es indígena y hay que tomarse la foto; sin embargo, el tema es más profundo y de un verdaderos análisis para hacer los cambios necesarios y atender esta vulnerabilidad”, dijo.
Imelda Aparicio, estudiante sobre el tema de esta conmemoración, dijo que poco se sabe y poco se hace para conmemorar esta fecha. A pesar de ser mujer indígena dijo que es un día más en el calendario porque todos están encausados en ganar el pan para las familias.
Finalmente, el punto de coincidencia en todas las voces es que el tema de la mujer en varias de sus perspectivas sólo es un punto en la agenda de los funcionarios, por lo que pasar de una conmemoración a un reconocimiento real a la mujer indígena está lejos, y siguen siendo ellas las más vulnerables y las más sobajadas en aras de la equidad en la Mixteca y Oaxaca.
