La disputa por la dirigencia del Sindicato de Trabajadores de los Poderes del Estado e Instituciones Descentralizadas de Carácter Estatal de Oaxaca (STPEIDCEO), derivó ayer en el segundo connato de violencia entre grupos antagónicos.
De cara al proceso de renovación del Comité Ejecutivo, grupos de choque del actual líder, Felipe Noel Cruz Pinacho, reventaron con violencia la asamblea de delegados que se celebraba en la sede de la gremial.
Lo que sería la reunión para la designación de quienes integrarían las comisiones de Reglamento, Vigilancia, Honor y Justicia, y Electoral terminó en zafarrancho en donde salieron volando sillas, se rompieron cristales de la puerta de acceso y se detonó una bomba de gas lacrimógeno.
De acuerdo a testimonios de los trabajadores, Cruz Pinacho pretende imponer como su sucesor a Juan Rafael Rosas Herrera, quien ya fungió como dirigente hace tres años y no benefició a la base trabajadora, sino únicamente a sus incondicionales.
La inconformidad derivó en conato de bronca dado que en la asamblea se encendieron los ánimos entre los distintos grupos por la designación de los integrantes de las comisiones.
“Ellos quieren a sus incondicionales para llevar a cabo el proceso de renovación sindical amañado y ya preparado para el regreso de Rosas Herrera, la base ya se cansó y por eso se han armado los trancazos”, relataron.
Del intercambio de golpes, sillazos y hasta una bomba de gas lacrimógeno al interior de la sala donde se realiza la asamblea, resultaron varios intoxicados, ninguna de gravedad.
Los inconformes indicaron que porros llegaron a reforzar a los delegados que apoyan al actual secretario general, Cruz Pinacho, quien busca que las comisiones se integren con gente a su favor dado que pretende beneficiar a la planilla Verde.
El cambio de dirigencia se tiene contemplada para los primeros días de diciembre, no obstante es el segundo connato de violencia que se registra en la asamblea de delegados y se espera crezca la algidez en los próximos encuentros de cara a las elecciones.
