Los socavones que afectan diversos puntos de la capital, resultado de las lluvias y de la falta de mantenimiento de las autoridades, aún no tienen plazo para ser reparados. A casi dos meses, trabajadores con maquinaria pesada se encuentran realizando trabajos de retiro de tierra y escombro en uno de los puntos, sobre las riberas del río Salado.
Desde el pasado mes de junio en que se formó un socavón se mantiene cerrada la circulación vial a la altura de la colonia Cieneguita y Satélite. Tras una supervisión por parte de representantes de la Coordinación Estatal de Protección Civil se determinó cerrar la circulación vial en su totalidad, así fueran motocicletas y bicicletas ante el riesgo de que el hundimiento pudiera ocasionar un accidente.
Hace un par de semanas se iniciaron las labores para reparar el hundimiento; sin embargo, a decir de los trabajadores, la lluvia ha retrasado la intervención en ambos carriles, por lo que los trabajos van a continuar.
A mediados de junio las intensas lluvias y la negligencia oficial permitieron que se formara un socavón que se extiende desde la calle del Pipe hasta Linderos, en la colonia Satélite; por ello, la circulación vial debió ser desviada para todo tipo de vehículos.
Como medida de prevención vecinos del lugar colocaron piedras sobre el pavimento para restringir el paso vehicular; sin medidas preventivas de las autoridades, solo una cuerda y ramas también sirvieron para advertir del peligro a los conductores y peatones.
Para evitar accidentes los objetos aún continúan en el lugar desviando el flujo vehicular sobre la calle de la Cieneguita, con opciones de salida hacia la avenida Universidad o continuar por las riberas del río Salado.
Pese al incremento del paso vehicular no se han registrado accidentes; tampoco se han reportado otros hundimientos o daños a la infraestructura pública a raíz de la circulación de unidades de carga.
A más de dos meses de haberse reportado el socavón, los trabajos para rellenar el hundimiento no terminan. Del lugar fue retirada una luminaria, así como tuberías que deben ser sustituidas a fin de dar cauce al agua que pasa por debajo del arroyo vehicular. La carpeta asfáltica también se retiró por lo que para la normalización de la circulación esta deberá ser restituida.
