Con más de 500 permisos temporales aprobados, alrededor de 400 para operar en el Centro Histórico en expoferias y puestos de maquillaje, las calles de la zona patrimonio mundial de la ciudad de Oaxaca ya se encontraban repletas de puestos de venta o de oferta de servicios.
En estos días por las que las fiestas de Día de Muertos también representan una temporada turística, calles como Macedonio Alcalá —declarada como peatonal— se encontraban restringidas al paso de locales y visitantes. En parte por la expo feria y puestos de maquillaje (pintacaritas) ubicados desde Berriozábal hasta el cruce con la avenida de La Independencia. Pero también por un tapete monumental que limitó el paso a las banquetas entre Morelos e Independencia.
Por cuotas que iban desde los 150 pesos hasta las que sobrepasan los 250, cerca de un centenar de maquillistas ofrecían sus servicios de caracterizaciones de catrinas y catrines. Sin contar los resplandores o diademas de 150 pesos o los tocados de flores que otros más vendían.
Aunque el cabildo aseguró que para las expo ferias solamente se autorizaba la venta de artesanías, tanto en las dispuestas en el andador turístico, la calle Constitución y en el jardín Labastida, en este último fue posible observar que se expendían aguas frescas y artículos de papelería, además de inciensos.
El jueves, tras la sesión de cabildo, el edil Francisco Martínez Neri, aseguró que por la noche el ayuntamiento recorrería las expo ferias para verificar que los giros, medidas y fechas autorizadas se cumplieran. Además de que quienes en ellos vendieran correspondan con quienes solicitaron los permisos al municipio.
Sin embargo, hasta ayer se desconocía si se detectaron omisiones a los dictámenes y si se había retirado a algunos vendedores o artesanos. La revisión estaba relacionada también con la queja de vecinos y comerciantes establecidos del Centro Histórico, quienes han denunciado la presunta venta de espacios por parte de terceros e incluso concejales del ayuntamiento.
